Without ever touching his skin,
How can I be guilty as sin?***
Las próximas semanas están repletas de cientos de cosas por hacer y actividades por cumplir. Tantas que ni siquiera sé por donde empezar: el summer break es en un mes y todavía no tengo planes como para organizar algo en mi agenda. No es como que sea la persona más social y esté deseando salir en mis días libres, pero creo que sería buena idea salir de mi zona de confort un poco más y animarme a hacer algo nuevo.
También tengo la gala que organiza la Fórmula 1, que me tiene nerviosa e intrigada porque es la primera vez que voy a asistir, así que no tengo idea de qué esperar, pero me emociona bastante. Hay dos opiniones al respecto. Sebastian dice que es aburridísimo y que no es la gran cosa, mientras que a Jenson le parece una maravilla y espera cada año para asistir.
Y por supuesto, está mi cumpleaños.
Nunca sé cómo sentirme o cómo comportarme en mi cumpleaños. Nunca sé qué cara poner cuando me felicitan, o qué responder una vez que lo hacen. Sé que se supone que se trata de mi día especial, pero de todas formas es raro que todo gire a mi alrededor porque no quiero causarle molestias a los demás. Sé que Ferrari organiza todo un desayuno con pastel y regalos, pero no me gustaría que el equipo se sintiera obligado a participar, porque tal vez no es algo que les guste hacer.
Pero ya veré cómo solucionar eso cuando el momento llegue. Por ahora estoy tratando de lidiar con batallas a corto plazo, y hoy eso significa la rueda de prensa. Otro día de prensa significa otra oportunidad para que cuestionen nuestros desempeños como si tuvieran idea de lo que conlleva manejar un monoplaza. Es ese momento en que nos sentimos como animales en un zoológico puestos en display bajo el escrutinio de decenas de extraños cuyo trabajo pareciera hacernos pelear entre nosotros mismos.
Lewis, Sebastian, Fernando y yo compartimos la mesa en el primer horario del día, y ante nosotros, los periodistas y entrevistadores toman asiento, listos para preguntar a diestra y a siniestra en búsqueda de algo en lo que puedan sacar polémica, aunque tengo el presentimiento de que se están dando por vencidos porque últimamente no han obtenido nada por parte de ninguno de nosotros. Siempre le doy el crédito al equipo de relaciones públicas de Ferrari por haberme entrenado tan bien respecto a lo que es aceptable o no responder, pero ahora que lo pienso, todos los equipos hacen un gran trabajo con nosotros, porque pareciera que vamos a la misma escuela y tomamos las mismas clases. Sabemos perfectamente cómo mantener la calma y responder una pregunta pasivo- agresiva con una respuesta digna de la realeza de Inglaterra. No es lo que quisiéramos, por supuesto. Somos pilotos, no modelo de las naciones unidas, pero por el bien de nuestra imagen (y por eso me refiero a nuestros patrocinadores) lo mejor que podemos hacer es apelar a la diplomacia y responder lo más neutral que se pueda.
— Avalon, ¿cómo te sientes luego de estas últimas carreras? ¿Crees que has tenido un buen desempeño? — pateo a Hamilton por debajo de la mesa para que dejara de hacerme reír y poder contestar la pregunta con seriedad, pero de todas formas la sonrisa en mi cara fue obvia para todos los presentes.
— Sí, me he sentido muy cómoda con el auto. Kimi y yo hemos pasado varios días en Maranello platicando con los ingenieros para corregir algunas fallas, y ha resultado para bien. Creo que esta temporada con Ferrari ha sido muy fructífera en lo que va del año.
Asienten y continuan escribiendo con agilidad sobre el papel, rehusándose a perder una sola palabra de lo que digo. Un par de flashes son disparados desde el fondo para capturar el momento en una fotografía.
— ¿Estás satisfecha con tu posición en la tabla?
— No voy en primer lugar, así que no. — ¿qué clase de pregunta pendeja es esa? — Por supuesto que hay áreas de oportunidad, y claro que han habido carreras en las que por una cosa o por otra no pude conseguir puntos. — a pesar de que no lo digo en voz alta porque creo que todos saben que me refiero precisamente a las carreras en las que Vettel me saboteó, y en las que Ferrari no tuvo una buena estrategia.
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Golden Boy || Sebastian Vettel
RomanceOh, I love it and I hate it at the same time 💛🏎️💛🏎️💛🏎️ El odio entre Avalon y Sebastian va mucho más allá de sus equipos y de la rivalidad que conlleva el deporte. Ambos lo saben, los dos lo admiten y ninguno se esconde. Dispuestos a todo por...