Obsession; Damian Fox.

Capitulo 29

Narra Maggie. 

Después de tocar las puertas de Archie y Tatiana, ellos me dijeron que luego de cambiarse bajarían a la merienda. 

Luego me acerque a la habitación de Damián para poder avisarle sobre la merienda. 

Mientras esperaba a que Damián abriera, sentí cierta tensión en el aire. 

Después de unos segundos, la puerta se abrió, pero mi sonrisa se desvaneció al ver a una mujer muy atractiva de pie frente a mi. 

Una mujer. En la habitación de Damián. Que no es parte de la manada. 

Ok. 

La mujer me miró con curiosidad y, al notar la sorpresa en mi rostro, preguntó con amabilidad:

- ¿Se te ofrece algo?- Pregunto al ver que yo no me movía. 

Algo desconcertada por la inesperada presencia de UNA MUJER, balbucee por un momento ya que quede tan desconcertada que las palabras no salían de mi boca. 

-Quería avisar que la merienda ya está lista en el salón principal. Dijeron que debemos bajar- 

La mujer sonrió y pareció entender la situación. 

En ese momento, Damián apareció detrás de ella con su característico semblante serio. 

Lo mire a los ojos y luego volví mi atención hacia la mujer. 

- Gracias por avisarnos. Estaremos allí pronto -respondió Damián con su tono imperturbable.

Me sentí un tanto incomoda así que asentí y retrocedí un par de pasos . 

- Bueno, nos vemos abajo. -me despedí con una sonrisa forzada mirando a Damián antes de alejarme de la puerta.

Me aleje y seguí a la habitación de Poe. 

Toque dos veces hasta que Poe abrió la puerta con una enorme sonrisa. 

-Hola caramelo- 

-Hola Poe- 

-Pasa- dijo el dejándome un espacio -Que sucede?-

Al pasar admire la habitación de Poe, era muy diferente a la mía pero seguía siendo bastante linda. 

Tome asiento en el borde de su cama. 

-La ama de llaves dijo que hay una merienda en el gran salón, debemos estar allí ahora- mire a Poe y luego de suspirar me pare de su cama -Debo irme, tengo que cambiarme- 

Estaba a punto de salir cuando Poe puso una mano sobre la puerta. 

-Caramelo, se que nos conocemos hace poco tiempo pero sabes que puedes confiar en mi- dijo el con una leve sonrisa.

Yo suspire al escuchar las palabras de Poe -Lo se Poe- lo mire a los ojos -Solo es que... esto de la cacería me tiene nerviosa- mentí. 

-Tranquila caramelo, no es tan malo como parece- 

-Es solo que... hay algo aquí que no me cuadra- dije para luego salir. 

[...]

Poe, con su característico sentido del humor, comentó mientras bajaban las escaleras.

- Espero que sirvan rollos de carne.-

Padme hizo una mueca de disgusto al entender a qué se refería, y no dudó en expresar su desaprobación.

- ¡Qué asqueroso! Ya sé qué tipo de carne van a servir.-

Tatiana, compartiendo el sentimiento de disgusto, también hizo una cara de desaprobación. 

Cuando finalmente llegamos al gran salón, nos encontraron con una multitud de personas, lo que nos indicó que la mansión estaba más concurrida de lo que habíamos anticipado.

Con los miembros de la manada nos sumergimos entre la gran multitud 

Algunas caras eran conocidas, pero la mayoría eran desconocidas para mi. No tanto para Poe,  ya que cada dos pasos saludaba a alguien. 

-Poe Verne!- exclamo alguien de pronto.

Era la misma mujer que dio el anuncio de La Cacería aquella noche. 

La mujer se destacaba con elegancia en medio de la multitud con su deslumbrante vestido rojo que fluía hasta el suelo. 

La prenda realzaba sus curvas de manera sutil y le confería un aire de sofisticación. 

Su cabello estaba recogido en un impecable rodete, revelando su cuello delicadamente esculpido. La piel de su rostro, de una suavidad aparente, irradiaba una palidez que acentuaba su belleza.

Su presencia era magnética, haciendo que resultara casi imposible apartar la mirada. 

Cada detalle, desde la elección del vestido hasta el cuidado de su peinado, contribuía a crear una imagen de refinamiento y elegancia que la distinguía en la atmósfera de la Mansión.

-Gea- contesto Poe. Ella extendió su mano y el la tomo dejando un beso en sus nudillos -Supongo que recuerdas a mi manada- 

-Por supuesto- ella movió ligeramente su cabeza -El diseñador y su novia- le dedico una sonrisa a Tatiana y acerco su mano a Archie tal y como lo hizo con Poe. 

Archie parpadeo desconcertado y dejo un ligero beso en su mano. -Admiro tu trabajo muchacho- le dedico una ultima sonrisa a Archie y se dirigió hacia Poe.

-Por cierto, tu solicitud fue enviada esta mañana, tardara unos días en ser evaluada-

-Y supongo que contare con tu apoyo-  replico de forma encantadora con una voz que hasta a mi me sonó seductora.