1 🤍 Proteger

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El sol brillaba, el cielo era de un azul hermoso, el viento soplaba con una brisa refrescante, acompañado de unas risas felices de dos jóvenes hechizeros de grado especial.

—Vamos Suguru, debes admitir que soy el más guapo de todos los estudiantes.

El peligro hizo una mueca de desagrado —como tu digas Satoru, pero lo importante es la popularidad y esa la tengo yo.

Dijo con una sonrisa segura, el albino a su lado hizo un puchero —pronto yo seré el número uno, ya verás.

Gojo corrió hasta el borde del puente que cruzaban, miro el paisaje fascinado. —Mira Suguru, no es bellísimo.

El chico miro con una sonrisa llena de ternura a su mejor amigo y un ligero sonrojo se presentó en sus mejillas. —Si, es el más bello.

Satoru lo miro y sonrió hasta que se quedó embelesado mirando lo hermosos que eran los morados ojos de Suguru, los cuales brillaban debido al sol.

Sacudió su cabeza regresando su mirada al paisaje sintiendo sus orejas y mejillas arder. Por concentrarse en su inestable sonrojo terminó perdiendo el equilibrio.

Se tambaleó en la orilla de ese puente y cerró sus ojos cuando sintió que caería sobre su espalda.

Sin embargo esto nunca pasó, abrio sus ojos confundido y lo siguiente que miro fue su rostro a milímetros del de Geto.

Quien tenía una mueca de color en su rostro —ten más cuidado Satoru, creo que me rompí la pierna.

Geto frunció su ceño cuando el mayor no dijo palabra alguna y solo lo miraba fijamente. Trago en seco al ver en la posición en la que se encontraban.

Satoru guío su mano a la mejilla del pelinegro limpiando con suma delicadeza restos de tierra sobre esta.

Geto se tenso ante el suave toque, no pudo evitar dirigir su mirada a esos hermosos y rosados labios tan cerca suyo.

Fue hasta que un claxon y una moto a toda velocidad los saco de su nube.

—¡Muevanse idiotas!

Satoru abrazo el cuerpo de Geto y se inclino hacia atrás evitando ser atropellados. —¡Idiota tus bolas, imbécil!

Le gritó enojado al conductor sin percatarse de que abrazaba con fuerza contra su propio cuerpo el de su mejor amigo, quien no sabía cómo reaccionar.

Al darse cuenta rápidamente lo aparto y se levantó sacudiendo su uniforme — vamos, Suguru —le extendió la mano al menor quien aún seguía algo consternado.

La tomo pero al intentar levantarse noto que su tobillo sangraba — parece que no me salió gratis tu descuido.

                               🤍❤️‍🔥🖤

—Listo, sanaras para mañana o máximo 2 días. —Menciono Shoko después de terminar de vendar el tobillo de Suguru.

—Gracias Shoko, dile a tu amiguito que sea más cuidadoso. —Menciono mirándolo con una sonrisa enojada.

Gojo levanto su ceja —yo no pedí ser salvado.

Shoko suspiro cansada—ya van a pelear de nuevo.

Geto y Gojo se sacaron las lenguas girando sus cabezas dignos y molestos.

Su amiga se levantó de la cama de Suguru mirando el atardecer —tengo que irme, mañana iré a una misión a primera hora.

Gojo frunció su ceño —¿tú sola?, ¿No quieres qué te acompañe?

BAJO EL MISMO AZUL 💙 / SatoSuguDonde viven las historias. Descúbrelo ahora