El Perfil Del Novio De Mi Ex [Corrigiendo]

VI - Invitación ✔️

Los Domingos eran los más deprimentes para Michael, porque era cuando más solo se sentía.
Estaba fijado como su día de descanso y Jonathan sabía respetar ese espacio.
Desde la ruptura con Sara, su casa parecía ser más grande de lo normal, tan fría y gris.
Y para evitar la soledad o lo que más bien él llamaba aburrimiento, solía despertar más tarde de lo que acostumbraba entre semana.

Le pareció escuchar el sonido de algo entre sueños, como si golpearan cortinas, por un momento creyó que era una visita, hasta que decidió levantarse y asomarse a la ventana. Su decepción fue tal, cuando solamente vió un camión que estaba descargando mercancía.
Suspiró irritado, regresó a la cama, pero su sueño se fue por completo, por más que trató de dar vueltas, buscando encontrar la posición perfecta, le era imposible volver a dormir.
Dirigió su mirada al reloj, que marcaba exactamente la 01:57 pm, era hora de salir de la cama, aunque éso significara dormir un poco más temprano.

El primer movimiento que hizo fue ver su perfil en StelRM, era igual de gris que su vida, así que decidió subir un par de fotos, una de él, otras del paisaje, todas en blanco y negro.
Después de unos minutos recibió una estrella azul de Jonathan en la app y una carita feliz en la bandeja de comentarios.

«El idiota está despierto», pensó.
Tal vez era hora de abandonar el plan de averiguar de Sara y sobre todo era hora de deshacerse del insulso novio de su ex.
Michael recibió un mensaje de Jonathan, quien le envió una invitación digital invitándolo a un evento benéfico de su ciudad. Probablemente se lo debía, después del favor que hizo por él y para evitar un daño colateral donaría algo de dinero.

Y le confesaría la verdad.

Fue algo extraño mirar su clóset, se la pasó buscando una elección para la ocasión.
El abogado tuvo un paso tortuoso al ver el espejo aún roto del baño, recordando lo que lo había llevado hasta este punto, e incluso pensó en los causantes de todo su dolor.

El ver al novio de Sara de frente, el verla a ella, probablemente le ayudaría a cerrar ese capítulo doloroso en su vida.

Era hora de soltarlos a los dos.

Después de un rato llegó a la conclusión de que no debía ir, ni tampoco le debía nada, no después de que aquel hombre le arrebató a la mujer de sus sueños.
Fue allí cuando recibió esa notificación, un vídeo más del chico sonriendo, además de un audio que fue enviado antes.

—¡Hey! ¡Estoy tan acostumbrado a enviarte cosas! Últimamente he estado hablando solo con mi teléfono durante casi un mes, que me fue inevitable grabar esto en la mañana para ti.

Cerró los ojos un momento y fue inevitable pensar en las veces que de seguro buscó las palabras perfectas, lo imaginó recorriendo el sitio dónde entrenaba con el teléfono en la mano.
Posteriormente puso el vídeo, ahí estaba la imágen que se imaginó.

El mismo sitio de siempre.

No quería más su imágen en su cabeza.

—Son las 06:07 am, estoy grabando esto antes de que se me olvide qué decir.
No te he comentado mucho de mí, pero toco el saxofón y hoy tendré una presentación en la ciudad, será un evento benéfico, no solamente seré yo, participarán varias personas.
Creo que las personas al escucharme decidirán aventarme tomates, así que sería una buena idea tener un abogado que pueda salvarme.
Hace tiempo que no toco nada en absoluto, probablemente será una noche desastrosa.
Pase lo que pase, creo que te divertirás.

Parecía que no quería que olvidará esta noche.

Después de estar evadiéndolo la mitad del día, pasando por el martirio de cambiarse de corbata varias veces, ponerse abrigos, y sobre todo buscando excusas para no ir.
Al final, ya estaba subido en su auto, colocando el celular en el estéreo como siempre. Fácilmente creerían que él era chófer de aplicación, siempre con el teléfono ahí.
Pero no, ese sitio era del novio de Sara. Aclaró un poco su garganta, e hizo la videollamada.

Posteriormente giró su mirada hacia abajo, buscando ponerse adecuadamente el cinturón. Escuchó un “hola” en voz baja, levantó su mirada y observó a Jonathan ya con el saxofón, probablemente estaba en el lugar practicando.

—Solamente quería avisarte que voy en camino.

—Creí que no vendrías, no habías respondido así que... pensé que no te iban este tipo de eventos.

—Los Domingos es cuando más aprovecho para dormir, solamente vi tus mensajes, luego volví a dormir. Y si te hace sentir más tranquilo, no he hablado con nadie más hoy, eres mi primera llamada del día. Bueno, ya está, te veo allá, Jonathan.

Luego colgó.

Y más tarde, cuando llegó al evento, la espera fue tortuosa.
El último caso había sido demasiado mediático, entonces tenía a varias personas encima haciéndole preguntas. Queriendo realizar una consulta gratis.

“¿Cómo me divorcio?”, “¿Cómo sé escapa de una acusación falsa?”, “¿Cuál es el costo de...?”.

Su respuesta: «Contraté primero un abogado, luego le pregunté lo que quiere».

Luego de una larga espera, Jonathan salió al escenario, aquello fue extraño.
Era la primera vez que lo veía fuera de su teléfono tan claramente, e incluso el sonido de su voz era relativamente inexplicable.
Tenerlo relativamente cerca, saber que era real, fue definitivamente una mala broma.
Nuevamente tuvo los flashback de aquella noche, el momento en que perdió a Sara para siempre.
El acto terminó, dió la media vuelta, y le pareció ver a su ex novia otra vez.

Su corazón latía al mil por hora, buscó salir de la multitud, la respiración se le entrecortaba y el oxígeno parecía cortarle la garganta.

Sara estaba ahí.

¿Cómo no iba a estarlo? Sí ella era la novia de Jonathan y él un completo extraño.

No supo cuánto corrió, solamente el malestar en su garganta y la falta de aire le indicaban que el volver a ver a Sara le causaba terror.
Pensó que fue demasiado estúpido creer que podía verlos juntos a los dos.

No, claramente no podía.