Mundos diferentes

Capitulo 17: Diferente

Meredith:

Nuestros labios se unieron de una forma desesperada, apasionada, diferente... dándole paso a nuestras lenguas, que lo único que deseaban era conocer cada rincón de la boca de la otra, conocer hasta el lugar más mínimo de esta. Deseando calmar una angustia que curiosamente ambas sentíamos...mi corazón, mi pecho, mis músculos y toda yo, estaban sufriendo una revolución constante y un hormigueo que recorría todo mi cuerpo, mientras sus manos se enredaban en mi cabello y ambas profundizábamos más el beso.

Si, quería hacerle el amor aquí mismo, como nadie se lo ha hecho nunca...pero algo me sucedía, algo me impedía recorrer y conocer su cuerpo como yo quiero, dirigirla, darle rienda suelta a esto que siento, pero solo me limito a besarla hasta que mis labios se gasten.

Hasta que es ella la que toma las riendas de la situación y en un movimiento rápido, ejerció un poco de presión, dirigiéndome hacia la cama y de un momento a otro rompió el contacto, mirándome fijamente a los ojos.

¿Y ahora qué?, mi cuerpo temblaba al ver lo intenso del color de sus ojos, que me miraban, como si intentaran descifrar lo que estaba sintiendo, mientras dentro de mi estaba nerviosa, con incertidumbre, pensando que esto era un sueño, sueño que ella debió notar, ya que de forma lenta y delicada acerco su mano hacia mi mejilla y la acaricio, brindándome esa tranquilidad que necesitaba, yo cerré mis ojos y cuando estos volvieron a abrirse, pude notar que no era un sueño, que ahí estaba ella, observándome con una mezcla de dulzura y deseo, que nunca había visto y haciéndome ver que esto era real.

Su mano descendió por mi rostro, dirigiéndose lentamente hacia mi cuello y rosando mi cuerpo de forma lenta, mientras una electricidad recorría mi cuerpo, después dirigió su mano hacia la mía y la levo hacia su cintura...permitiéndome sentir su piel a través de su ropa, y me estremecí...ella no quería soltarme, así que me deje llevar y de forma decidida y olvidando un poco ese miedo que me invadía, introduje mis dedos por debajo de su camisa, permitiendo sentir la calidad de su piel estremecerse también.

Acaricie su cuerpo y comencé a levantar la prenda muy despacio, permitiendo que ella me parara, si lo deseara, pero no lo hizo, su mirada me invitaba a continuar, hasta que me deshice definitivamente de ella, y sentí que mi mundo se paró, cuando la observe semi desnuda, enfrente de mí y viéndome con esa mirada intensa, que me observaba con deseo, pase las yemas de mis dedos por cada parte de su torso, su abdomen firme y ligeramente marcado, su ombligo, que solo me incitaba a jugar con él, sus senos...indescriptibles. Roce su pecho con mis dedos, este solo ascendía y descendía notablemente a mi paso, permitiéndome sentir como latido de su corazón, se sincronizaba con el mío.

Ascendí hasta su cuello...cerré mis ojos mientras la acariciaba y entonces sentí la enorme necesidad de volver a tenerla conmigo, así que me incliné un poco más, rompiendo la distancia entre nosotras y mientras respiraba su aroma, deje pequeños besos a lo largo de su cuello, que lograron que emitiera pequeños gemidos a mi paso.

Mi lengua jugueteo con el lóbulo de su oreja y su piel se erizo aún más...bese su mejilla, su mentón, y una vez más llegue hasta sus labios, permitiéndome observarlos, sintiendo como nuestras respiraciones aceleradas se mezclaban entre sí...los acaricie y por fin los volví a unir con los míos, de forma lenta, cuando sentí que sus manos rosaban mi espalda y de un movimiento rápido, se deshizo de mi playera, dejándonos en iguales condiciones.

Y esta vez sí, me permití rodear su cintura, y la atraje hacia mí, unido nuestros labios en un beso, diferente a los anteriores, lleno de deseo, de adrenalina, de amor. Nuestras lenguas se esperaban, mis manos acariciaron su espalda...dios mío esta mujer tiene la piel más tersa que he tocado, logrando que todo mi cuerpo se desestabilice con solo rosar mis dedos con su piel.