Ｖａｓｓｙ Ｆａｃｅ

19. Ojalá...

-Joder, al fin. -Suspiró Vas. -Estas tres giras se me estaban haciendo larguísimas, ni Titanic se me hizo tan largo.

-Sí, eh... La verdad que vaya mierdas, a primera tutoría y a segunda matemáticas, con el mismo profesor, Heliodoro. No sé qué le pasa que no sonríe, parece amargado. -Añadió Héctor poniendo los ojos en blanco.

-Será porque lo es... Bueno, quedamos en que nos íbamos a encontrar con estos en el patio... Vamos a ir yendo, ¿no? -Dijo Vas, entusiasmada.

-Ah, sí, cierto. Se me había olvidado. -No sonó borde, sino que simplemente se le había olvidado por completo.

Mientras iban al patio, o, más bien, intentaban, ya que se habían perdido, vieron en el pasillo a Sal y... ¿Una chica? Rápida se acercaron, por petición de Vas. A ella le gustaba Sal, pero le daba miedo que la rechazase... ¿Y si le gustaba esa niña? No, imposible... Pero, ¿y si sí?

-Hola, Sal. -Habló Vas, acercándose a Sal.

-¡Hola! -Sal corrió a abrazar a Vas, ella no se lo esperaba. -Ash, esta es Vas, de quien te hablé.

-Me hago una idea, con verla supe a quién te referías, me has hablado tanto de ella que... Imposible no saber quién es. Un gusto, soy Ashley Campbell. -Ashley se veía muy amable, era muy linda y estaba sonriendo.

-Hola. Sí, soy Vas, me alegro de conocerte, Ashley. -Se presentó. -Él es Héctor, es tímido.

-Lo entiendo...No pasa nada, Héctor, no te preocupes, te entiendo, yo era igual. -Comentó Ashley, para que Héctor no se sintiera incómodo.

-Oh, ¿cómo hiciste para dejar de serlo? -Preguntó Héctor con curiosidad.

-Bueno, hace tiempo salí del armario cómo lesbiana, a partir de ahí empecé a abrirme más... No sé cómo explicarlo... -Contestó Ashley a la pregunta de Héctor, quien se esperaba cualquier cosa menos eso, ahora no sabía que contestar.

-Me parece muy bien que al abrirte de esa manera hayas podido mejorar tu timidez... -Se notaba su vergüenza, esa conversación se estaba volviendo cada vez más incómoda. Sal se dio cuenta, por lo que intentó cambiar el tema de la conversación.

-Bien... Larry nos está esperando fuera, vayamos con él, no me gustaría dejarle solo. -Sugirió Sal, más cómo obligación. Sugerencia obligatoria.

Sin preguntar, le dio la mano a Vas, y agarró el brazo de Ashley, haciéndole una seña a Hector de que les siguiese, cosa que él hizo, ya que se llevaba muy bien con Larry. Llegaron a una parte del recreo que estaba más alejada de lo común, algo no lo veían cómo... Debía ser.

Y, exactamente, no estaba yendo todo bien.

-¿¡Larry, qué coño haces con un porro!? -Exclamó Héctor, asustado, podían pillarles.

-Pero si ya sabes que fumo, no veo porqué te sorprendes. -Respondió con toda la tranquilidad del mundo, cómo si lo que estaba haciendo fuese normal.

-Joder, sí, pero estamos en una institución pública.

-De hecho... No estamos en el instituto... Sal os ha traído a un lugar que está cómo a tres minutos a pie de ahí. -Confesó Larry entre risas, Vas también se rió.

-¿Qué cojones ves de gracioso aquí? -Héctor se giró a ver a Vas, para descubrir que se estaba riendo junto a Larry. -¡Vas, por favor! -Mantuvo un silencio de un tiempo. -Bueno, aunque... No está tan mal.

-Sabía que en verdad te la sudaba. Vas, toma una calada.

Sal iba a decir algo, pero no le dio tiempo ya que Vas se estaba subiendo la prótesis y tomando una calada del cigarrillo. Dejó salir el humo por los agujeros de los ojos de su prótesis, que a la vez lo estaba expulsando por la nariz y boca.