TEARS - JungKook- BTS-

Parte 56

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Martes 07, Junio 2015.

La mañana es esplendorosa, el reloj en la mesita de noche marca más de las nueve de la mañana, en la habitación marcada con el número 177 se halla una hermosa mujer pelirroja completamente desnuda bajo las suaves sábanas blancas, aún duerme boca abajo abarcando gran parte del espacio en la cama, su respiración es lenta y tranquila, todo está en silencio adentro y en verdad no le importa el bullicio de la ciudad por ahora.

Se remueve sobre el colchón abriendo los ojos con lentitud y sonríe al recordar lo que pasó solo hace unas horas, cuando la luna fue testigo de lo que pasó entre ella y el bello ángel de la seducción que dice llamarse Jimin. Toca más allá de su espacio para sentir la bonita piel del hombre, pero lo único que encuentra es el espacio vacío y de inmediato se despierta, se sienta sobre la cama cubriendo la desnudez de su cuerpo mientras sus ojos buscan en la habitación al hombre.

—Jimin-ah.

Su voz es ronca, pero lo suficiente audible para el menor, mismo que no se encuentra en el cuarto. Mate vuelve a llamarlo un par de veces más y se cerciora que el pelinegro ha abandonado la habitación, se frota los ojos con delicadeza y revisa el reloj viendo que solo falta media hora para las diez y sabe que es tarde ahora, a pesar de no tener agenda para el día no se permite dormir tan tarde, ella no es así.

Sale de la cama envuelta en las sábanas y se dirige al baño en donde las deja colgadas y se mete para una ducha rápida y relajante, sus mejillas se colorean de rosa cuando comienza a recordar los labios del menor besando todo su cuerpo, su estómago da un vuelco y realmente no puede creer lo que pasó, ella quería ver la cara del menor a primera hora del día, pero quizás él la dejó descansar y fue a prepararse para un día libre, puesto que su avión parte pasado mañana.

Enjabona su cuerpo, pasa el jabón por toda su figura y cierra los ojos ante lo bien que se siente, su imaginación da un giro inesperado cuando siente una cálida mano acariciar su cintura y luego su vientre, un pequeño gemido sale de sus labios cuando siente una piel mojada unirse a la suya y luego unos cálidos labios besar su hombro desnudo y mojado, no abre los ojos porque disfruta del hombre que la está tocando, no sabe quién es pero sabe que lo conoce por la forma en que sus manos acarician su cuerpo y hacen sentir las mejores sensaciones de su vida.

—Noona.

Aquella voz gruesa sobre su oído le hacen abrir los ojos por la sorpresa, se da la vuelta solo para ver que no está volviéndose loca y cuando lo hace lo único que sus ojos capturan es aquella sonrisa tierna y sexy que lo delatan, sus ojos grandes y brillantes y su cuerpo de hombre con el rostro de niño que siempre lo ha caracterizado, los ojos de Mate se llenan de agua y no por el chorro que brota de la regadera sino por las lágrimas que está por soltar ante aquella presencia, el niño de sus ojos está desnudo junto a ella sonriendo sólo para ella y por primera vez Mate no quiere que esto acabe.

—Jungkook...

—Si noona, JungKook, tu Jungkook.

—Pero tú...

—Shhhh... —coloca su dedo índice sobre los labios de Mate sin dejar que esta termine su oración, él sonríe y la toma de la cintura nuevamente para besarla esta vez en los bonitos labios. —, solo disfruta conmigo noona.

Mate deja que las lágrimas fluyan de sus ojos y se mezclen con el agua cuando el menor la besa, todos los recuerdos con el menor vuelven a su cabeza, todo su mundo está boca abajo ahora y únicamente puede pensar en lo maravilloso que se siente besar de nuevo los labios de Jungkook y como adora la forma que tiene este de apretarla a su cuerpo, siempre ha sido tan mágico, tan tímido y tan sumiso con ella, y eso es lo que le encanta a Mate, que el menor puede ser ambas cosas, rudo y delicado, tímido y sexy al mismo tiempo.