16

1.2K 100 4
                                    

- Ramón y yo no queremos ver eso.

Ambas chicas se encontraban mirando películas, igual que la noche anterior solo que ahora el pequeño pug se les había unido, María José había dejado que Daniela eligiera las películas pero ahora era su turno y quería ver, por supuesto, una de suspenso y obvio Calle no estaba de acuerdo.

- Pero yo sí, no me voy a retractar.

Iba a poner play pero el lindo pug comenzó a ladrar y Calle se emociono al entender que ramón estaba de su lado.

- ¡Que lindo! ¿Ves como no quiere ver eso?

Poché frunció el ceño y dejó el control de la TV en el regazo de Calle, molesta se levantó y se metió al baño. Daniela no entendía su actitud aún así decidió que era mejor dejarla ver su película y le puso play, ramón ladro otra vez.

Los primero minutos pasaron y la chica salió del baño - Esto te da miedo, ¿porque lo estás viendo? - dijo poniéndole pausa

- Quería entender porque te gusta.

Poché sonrió en sus adentro, fue hasta la chica y le robo un beso, dos, tres, cuatro, tantos que ya los podía contar con los dedos de las manos. María José se había subido a su regazo y la besaba con intensidad, por supuesto las lenguas ya estaban involucradas. Daniela sólo podía suspirar ante tan deliciosos besos. Pero comenzó a pensar en que ya debían aclara esta "relación" que tenían, con todo el pesar del mundo rompió el beso, los labios rojos de María José eran tan tentadores pero intentó no miralos.

- ¿porque paras? - le preguntó la chica comenzando a dar besos en sus mejillas y yendo más abajo y antes de que llegara a su cuello Calle soltó la pregunta

- ¿Que somos?

- ¿que?

- ¿Que somos tu y yo?

- ¿Que se supone que deberíamos ser?

Calle rodó los ojos - ¿No vas pedirme que sea tu novia?

María José retomo la postura rápidamente, no sabía que responder y al parecer se noto en su cara ya que la desepcion apareció en el rostro de Daniela.

- No pienses cosas que no. Me gustas y debo aceptar que mucho - los ojos de Calle brillaron y Poché sintió cosas en su pecho - pero no quiero lastimarte, no sirvo para esto, no se amar, ya he arruinando a muchas personas y no quiero hacerte eso a ti.

El silencio que reino era muy incomodo y pesado, Poché se sentó a un lado de Calle para darle espacio, Daniela también se sentó y se le quedó mirando.

- Sabes que podemos intentarlo - le susurro - puedes pensarlo estos días, y si no quieres voy a entenderlo.

- Yo quiero - dijo segura - pero... No se, es difícil para mi.

-  Supongo que debo darte espacio - dijo y comenzó a levantarse - nos vemos otro día ¿si?

Apesar de que María José moría por decirle que se quedara solo asintió, se sentía confundida con sigo misma. Daniela le sonrió y disiendole adiós se fue. A los pocos minutos subió su hermana con una cara de enojo.

- ¿Que mierda le dijiste a Daniela? Salió con una cara de tristeza y ni siquiera se despidió.

Eso solo la hizo sentir peor.

- Me gusta y no se que hacer con eso.

.
.
.
.
.

Habian pasados al rededor de dos días desde la platica que habían tenido y en ese lapso de tiempo Calle había perdido las esperanzas de tener algo con María José, ni un mensaje le dejó y menos la fue a visitar a la cafetería. Su amiga Juli se dio cuenta de su estado de ánimo desde que la vio, hablaron sobre eso y ahora la chica le tenía un poco de resentimiento a María José.

Ahora eran las 4:57 de la tarde y Daniela estaba a punto de dormirse, en la hora que llevaban trabajando no habían tenido ni un solo cliente y solo estaban de adorno porque no hacian nada.

- ¿Y si nos vamos?

- La señora Park nos va a decir de groserías - respondio Calle medio dormida.

- No me importa que me diga que soy una perra estúpida por dejar la chamba.

Daniel comenzó a reír y Juli le siguió, la campana de la entrada solo y ambas voltearon a ver, y era, como ya sabrán, María José, solo que traía un estilo totalmente diferente al que solía usar. Un gorro de lana adornaba su cabeza, llevaba un abrigo gigante y parecía muy calientito era de color gris, un pantalón negro de esos que son muy calientes por dentro y por último tenia puesto un cubrebocas.

- Hola - cuando hablo su voz estaba totalmente ronca y Daniela supo que se había enfermado

- ¿Te enfermaste? - preguntó rodeando el mostrador para asercarse pero cuando estaba a punto de llegar a la chica esta estiró su brazos para impedir que se acerque más

- Me enferme mucho, no te acerques tanto.

- No me importa - quito los brazos de la chica y le dio un abrazo, Daniela no pudo verlo pero Poché se había sonrojado

- No te acerques - María José la aparto - ¿podrías darme un café?

- Claro, siéntate.

Calle no tardo ni cinco minutos, apareció rápido con la taza de café humeante y obvio bien cargado.

- Gracias.

- No tenias que venir si estabas enferma, estúpida.

Poché frunció el ceño - Me estoy esforzando por ti.

- ¿Eso que quiere decir?

- Lo pensé mucho y creo que quiero ser más que una novia de mentira.

El pulso de Calle se aceleró - ¿Entonces quieres ser mi novia de verdad?

- No.

- ¿No?

María José negó - soy yo quien debe hacer esa pregunta.

- ¿Eso quiere decir que si serás mi novia?

La chica se cruzo de brazos - No, ya te dije que yo debo preguntar eso.

- Pues que estas esperando, mujer.

- ¿No debería invitarte a citas primero?

Calle se rio - Podemos hacer eso siendo novias.

-OK, ¿quieres ser mi novia?

- No.

- ¿Porque? - Poché se quito el cubrebocas y Calle pudo ver su cara de preocupación - ¿es porque soy muy grosera? ¿O porque no soy tan sencible? Eso se arregla, yo... -

Daniela la interrumpió - no es eso, debes ser más romántica.

- No se la definición de romance - comentó María José - Daniela, se mi novia por favor.

- No.

- ¿Y ahora porque? - la chica ya estaba frustrada

- Me rechazaste dos veces.

Poché soltó un fuerte bufido - ¡De verdad me estoy esforzando en ser más sensible! ¡Se mi novia, Calle! ¡Por favor! - mientras hablaba con desesperación se había acercado a la chica y había puesto sus manos en los brazos de Calle

- ¿Serás menos enojona?

-Podría serlo por ti.

Calle sonrió - ¿Me consentiras mucho?

- Sí.

- ¿Saldremos a muchas citas?

- ¡Sí!

- ¿Me podrías das más besitos?

- Claro.

-Entonces, si quiero ser tu novia.

Les subo estos dos capítulos porque no voy a poder actualizar un buen tiempo, son un poco largo así que espero que los disfruten.

Mi Novia FalsaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora