Capitulo 17. Solicitud

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Me sentía tan mal por no poder ayudar a Tigresa y los demás en esta situación. Durante el tiempo en el refugio me gusto tanto la atención que recibía por todos que no me di cuenta de lo grande que era el problema. Es bastante decepcionante ver como tus héroes, refiriéndome a los Maestros del Consejo, como solo son una bola de oportunistas. Cuando confirme la información acerca de las órdenes que había dado el Maestro Buey quise reclamarle. ¿Tan tonto soy? Lo máximo que pensé en hacer fue reclamarle... Ni siquiera eso pude hacer.

Mis amigos enfrentaron durante días el pésimo trato de la gente. Al menos se me hubiera ocurrido en el momento tratar de explicarles que Tigresa no había dado esas crueles órdenes. Ese chico, Shang hizo más al tratar de mover sus influencias para que les permitieran a todos regresar al Valle de la Paz y no ir directamente a prisión preventiva.

Mei Mei, una chica muy diferente a la que conocía está Mei Mei es menos atrevida, menos sociable, menos extravagante pero muy curiosa con temas con los que nunca había tenido contacto o al menos eso creé ella. Me contó de sus sueños donde bailaba y peleaba como los guerreros de Kung Fu. Los tuvo una vez cuando era niña y les contó a sus abuelos, ellos le narraron a partir de ese momento algunas de las historias de los ancianos más longevos de su aldea. ¿Cómo alguien puede ver en sueños algo que nunca ha visto o escuchado? Era lo que se preguntaban sus abuelos. A Mei Mei solo le parece parte de la casualidad.

No cree en el destino, no cree en cosas mágicas y está aferrada a comprobar que muchas de las enseñanzas de Kung Fu son solo inventos de alguien. Por esa razón le causamos demasiada intriga. En especial yo. Las primeras veces que llegaba a preguntarme de todo me ponía demasiado nervioso, tenía miedo de que la Mei Mei que yo conocía saliera y me obligara a desposarla. Quizás lo hubiera hecho, casarme y formar una familia con la Mei Mei del pasado, su familia era genial y me trataban muy bien, el pastel de carne de su abuela era exquisito. Pero todo eso no era suficiente, era demasiado celosa, posesiva, dramática, su conversación sosa y no me satisfacía sexualmente. No era feliz con ella.

Con los días llegue acostumbrarme al sin número de preguntas de la nueva Mei Mei. Como intento de que dejara de indagar en mi comencé a preguntarle de su vida. Me confesó que durante su infancia vivía en una aldea olvidada por el mundo, lejos de la civilización. Su familia se mudó a la capital de China para buscar tratamiento a la enfermedad de su difunto padre, después de esa pérdida ella y su madre se quedaron. Tuvo acceso a una buena educación y cuando su madre contrajo matrimonio con un Americano se fueron de China. Así que ella tiene mucha información del mundo exterior, me gustaba que hablara de los lugares que había visto, de la música, de los libros, incluso de todo el mundo tecnológico que aun no entiendo. Según Mei Mei China no quiere que se sepan demasiado del mundo exterior porque se darían cuenta que no es la gran Nación que tanto les presume a sus ciudadanos.

En otro momento la tomaría por una chica con ideas locas pero dada la situación con el Consejo de Maestros creo que ella tiene algo de razón. Es sismóloga porque en el lugar donde vive en América al parecer ocurre demasiado este fenómeno. Ella insistió en regresar en China cuando se dio a conocer por televisión que el Guerrero Dragón había sido seleccionado, así que no dudo en venir averiguar más sobre su gran afición de la infancia, quedó atrapada por el golpe de Estado en una cafetería donde curiosamente el Teniente Bar Hiro pudo conversar con ella. De modo que cuando se presentó el presentimiento de que sismo que cause por la explosión podría causar un Tsunami ella pudo alertarnos.

Me parece bastante confuso como puede el destino poner a las personas indicadas en el momento indicado para que puedan ocurrir ciertos acontecimientos. Se que la aldea de donde ella proviene posiblemente este mi padre, mi padre biológico. Necesito ir ahí pero con todo lo que sucede lo veo complicado. Mei Mei intuyo que deseaba ir, no quiso indagar por qué pero entendió que necesito ir así que se ofreció a llevarme con ella.

Y Llegaste TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora