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Karla Parmesino

Un mes después...

-¿Puedes dejar de pensar en alguien que viste solo una vez en tu vida? - pregunta Pepe y frunzo el ceño -
- ¿Quién te hace creer que pienso en una persona? - pregunto cruzándome de brazos y se ríe -
- No creo que estés pensando en la mortalidad del cangrejo - responde y me guiña un ojo -
- ¡Cállate! - me quejo y se ríe más -

Niego y aunque tiene razón, prefiero hacerme la digna y en ese momento me salva Paulina quien llega con sus cosas para que comencemos a jugar tenis, me rio de la cara de tonto que pone Pepe cada vez que ve a mi amiga y carraspea para volver al mundo real.

-¿Lista para perder? - pregunta Paulina con ínfula de superioridad -
- Sueña - respondo y se ríe -

Nos alistamos y mientras tanto vamos hablando de la universidad, a diferencia de mí que estudio derecho Paulina va por diseño y modelaje y claro que es la favorita de ambas carreras, ella se lo gana a pulso bueno solo sonriendo y siendo la mejor, me rio de sus anécdotas y niega mientras se queja, Pepe se mantiene en silencio mientras Paulina nos cuenta de alguna chica y chico con los que ha estado desde que comenzó el modelaje.

-Diferente a diseño que no me llama la atención nadie - se queja y me rio más -
- Eso sería justicia - digo asombrada y nos acercamos ya a la cancha -
- Sé el juez de silla, hermoso - chilla Paulina y mi hermano asiente embelesado, niego y me preparo para comenzar el juego - vas a perder - dice mi mejor amiga con seguridad -
- Pues, veamos que pasa - respondo y sonríe para sacar ella -



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-Ganaste de suerte - se queja Paulina y niego entre risa -
- Quejona - digo y la rubia me mira con el ceño fruncido -

Cuando escucho mi nombre por Pepe, me detengo y me giro para tropezar sin querer con un hombre el doble de alto que yo, me arreglo y sonrío por educación, en cambio aquel hombre me come con la mirada causándome asco, Paulina carraspea y es de esa manera que el tipo reacciona, que repugnante.

-Disculpe señorita - dice y asiento -
- Nunca lo hemos visto aquí ¿nuevo? - pregunta mi amiga seria y el señor lleva su mirada a ella mientras sonríe -
- Sí, un placer Jorge Llanos - se presenta y Paulina se queda pensando hasta que estrecha su mano con la de él -
- Paulina Tarragona - se presenta mi amiga -
- ¿Y usted bella dama? - pregunta ahora mirándome y con voz de politiquero -
- Karla Parmesino - me presento y estrechamos nuestras manos -

Después de unos minutos mi hermano interrumpe a aquel hombre y nos despedimos educadamente de él, lo vemos marcharse y Paulina se queja, Pepe mira preocupado a aquel hombre y yo resoplo.

-¿Estamos de acuerdo que este club ahora acepta a cualquier don nadie? - pregunta Paulina de mala gana -
- Es un narco - comenta Pepe y me volteo a verlo -
- ¿Cómo sabes? - pregunto y resopla -
- Cosas hermanita ¿vamos? - pregunta y miro a Paulina -

La rubia me mira tan preocupada como lo estoy yo, frunzo el ceño y asiento más confundida que antes, los tres caminamos hasta salir del club y en el camino me llama Fefe, cancelo la llamada y Paulina se burla, niego y Pepe le sigue el juego a mi mejor amiga logrando que al final los tres terminemos riéndonos a carcajadas.

Después de que llegamos al estacionamiento, cada uno se sube en su coche, yo dejo mis cosas atrás y me arreglo en el piloto para ponerme el cinturón de seguridad, enciendo el coche y también la radio, va sonando Ni siquiera de Antonio Cartagena, sonrío negando pero lo dejo para entonces tomar camino y salir del estacionamiento.

Minutos después comienza a sonar Sin sentimientos de Grupo Niche, comienzo a tararear la canción y por algún motivo desconocido aquella chica vuelve a mi mente, son sus ojos que me persiguen, su cabellera negra, es ella y resoplo porque siento que me estoy volviendo loca, sigo manejando a casa.



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