Ese día Bill llego más tarde, habló conmigo y me consoló parecía molesto o irritado con Tom, mi hermana volvió a llamar esta vez si respondí, me dijo lo que había visto de Tom y tuve que inventarle una estúpida excusa de que solo había sido por trabajo, para darle promoción a la chica, ella pareció creerme, mi mamá también llamo y tuve que decirle exactamente lo mismo aunque no me convencía del todo que ella me creyera, no sabía cómo sentirme o como expresarme, solo estaba pensando en lo mismo, mi mente me torturaba a cada momento con la misma imagen.
...
Días después.
La puerta de mi habitación se abrió dejándome ver a Bill.
Nena, ¿podemos hablar? -Entro Bill a mi habitación.-
Si, dime -Trate de hablar normal pero en mi voz se notaba la tristeza.-
¿Sigues molesta con Tom? -Pregunto su gemelo.-
No -Mentí.-
O quizá simplemente no había mentido, porque en realidad no estaba molesta, estaba decepcionada.
¿Me lo prometes? -Pregunto de nuevo.-
Si -Mentí de nuevo.-
Se que lo que hizo no estuvo bien -Suspiro Bill.- Él no sabía lo que hacía y esta arrepentido.
¿Y por qué no viene a decirme eso él? -Pregunte con cierta molestia.-
Sabes lo orgulloso que es -Respondió Bill serio.-
Esta vez debería dejar su orgullo... Si es que realmente le importo -Le dije y sentí mis ojos llenarse de lágrimas.-
Claro que le importas muñequita -Dijo Bill acercándose hasta mi para tomar mi cara entre sus manos.- Solo trata de tenerle paciencia.
Eso intento -Le dije con una débil sonrisa.-
Bill sonrió también y me abrazo, parecía afectado y molesto, pero sinceramente yo no tenia ganas de arreglar algo que yo no había roto.
No has comido bien -Susurro.- He visto como botas la comida nena.
No he tenido mucha hambre -Hable bajito también.-
Por suerte Tom no se ha dado cuenta, guardaré tu secreto, pero... -Se detuvo un momento.- Intenta comer un poco más, ¿si?
Lo intentaré -Le dije débilmente.-
Te amo -Dijo Bill y luego se acercó a mi cabeza dejando un tierno beso en ella.-
Volvi a llorar en sus brazos, llorar era lo único que me libraba de la prisión en la que yo misma me había metido y de la que quizá no podría salir nunca.
...
Había pasado una semana y media, la gira por latinoamerica estaba cerca y en pocas semanas estarían en ensayos de nuevo. Tom estaba distante conmigo, Bill y yo estábamos un poco más unidos, pero yo me sentía extraña aun.
Estaba indecisa sobre ir a la habitación de Tom, quería hablar con él, pero a la vez quería dejar todo así, era extraño, me importaba estar con él, pero sentía que a él ya no, así que una parte de mi simplemente ya no quería luchar. Fui a su habitación pero él no estaba, decidí esperarlo y mientras lo hacía buscaba en los cajones de su habitación.
¿Qué era lo que buscaba? Realmente no lo sabía.
No encontré nada "comprometedor", pero en un impulso me puse una de sus playeras limpias, solo con mi ropa interior debajo, no me sentía del todo bien para pretender algo, pero solo quería sentirlo de nuevo y esta había sido la forma más sana de hacerlo. Regrese a mi habitación, necesitaba distraerme, así que me puse a arreglar algunas de mis cosas, encontrando en algunas bolsas, un poco del polvo blanco que Tom solía darme en las fiestas o en ciertas situaciones, lo deje aparte, no sabía si tirarlo o conservarlo.
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Dark Sensations - The Kaulitz Twins - +21 [EN EDICIÓN]
Ficción GeneralConocerte a sido lo peor que me ha pasado -Dije mientras mis lágrimas comenzaban a brotar de mis ojos.- Y aun así, no quiero perderte -Volvi a hablar, mientras me ponía de rodillas frente a él.- Pude ver la poca sorpresa que le causaron mis palabras...