<<Virus>> ~SPARTOR~ [TERMINADA]

Capítulo. 23

La noche ya estaba llegando, la niña había quedado dormida en los brazos de Sparta.

–Raptor, será mejor que busquemos un mejor lugar para pasar la noche, estamos muy expuestos.

–¿Sabes? He notado que estos árboles son lo suficientemente grandes y fuertes para poder escalarlos. Dormiremos en sus copas.– Seleccionó un árbol con las copas extendidas para poder caber allí.

Despertaron a Cache para que se sostenga mejor en el menor y no dejarla caer en el intento de escalar.

Al llegar a la cima del árbol, el alfa pudo notar que no hizo una mala elección, acomodaron sus cosas y empezaron a preparar la cena.

–¿Cuanto crees que nos falta para poder llegar al lugar seguro?– preguntó preocupado ya que había perdido la noción del tiempo.

–Acaban de pasar dos días, espero y logremos llegar antes del tercer día.– Revisó su celular, y se dio cuenta de que ya eran las 7:12 de la noche. ¿Tardaron tanto en escalar el árbol?

–Por cierto... ¿Dónde está Cache? – El omega volteó a todos lados buscando a la beta.

–Iré a buscarla, quédate aquí y vigila la comida.– Se levantó presuroso y buscó a la niña gritando suavemente su nombre.

Detrás de una gran rama del árbol salió confundida.

–¿Qué estabas haciendo?– Se acercó a la menor y pudo notar que había un gran espacio escondido entre las ramas, decorado con flores y las mantas ya colocadas. –¿Tu hiciste esto?

–Estaba aburrida, quería atribuir en algo. ¡Así que preparé la cama! ¿Ya está lista la comida?

–Uff... – Suspiró aliviado. – Vamos con Sparta, nos está esperando para comer.

La menor asintió y siguió al reptil hasta el lugar indicado para poder cenar.

....

12: 50 AM.

Movía su cola de un lado a al otro, teniendo el cuidado de no tocar a los dos menores.

Cache dormía en medio, Sparta estaba acostado al otro lado dándole la espalda. Pues los dos se propusieron en dar calor a la niña.

–Raptor...– Murmuró aún despierto.

–¿Mmmh?

–¿Por qué no duermes?–Pregunto al alfa.

Sonrió bobamente mientras sentía que su su cola era sostenida por una pequeña mano que lo acariciaba.

–No tengo sueño...– Raramente no se sentía cansado.

–Mientes con todos los dientes, Raptorcito.–. Igualmente sonrió.

Escuchó como el cuerpo del otro se dió la vuelta, a la misma vez, sintió una mirada clavada en el.

–Deja de acosarme.

–¿Acosarte? Yo lo llamaría "admirar la gran espalda que se carga mi alfa" pero si lo quieres llamar así...no es mi problema.– Tiró suave y juguetona mente de la cola del reptil.

–Suelta mi cola....– Advirtió, siguiéndole el juego.

–¿Y si no quiero? ¿Me vas a morder?– Internamente se arrepintió de haber abierto el hocico.

Raptor volteó, tomando como invitación el poder morder ese blanquecino cuello que el omega poseía.

–¿De verdad quieres que te muerda?– Utilizó su mirada matadora y brillante para dejar hipnotizado al otro.