Capítulo. 30

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6:00. PM.

Mientras el día había pasado volando, no perdieron ni un segundo de su valioso tiempo descansando.

Aprovecharon para examinar desde el interior y exterior al laboratorio oculto.

Después de tener toda la información y datos necesarios para poder entrar, todos se volvieron a encontrar donde habían quedado.

–¿Todos están aquí?–. Víctor tenía el mando desde ahora.–. Sparta infórmame.

El ya mencionado aclaró su voz y sacó la cabeza de su escondite para apuntar hacia el laboratorio.

–Muy bien...comenzamos con la entrada, obviamente está llena de guardias. Si logramos deshacernos de ellos podremos entrar y encontraremos unos planos de la construcción, en el cual, nos podremos guiar para encontrar a los híbridos.

–Conseguimos un poco de armamento para sacar a esas personas de nuestro camino.–. Dijo Mayo,quien con una señal, llamó a la menor.–. Cache se ofreció para traer las cosas que necesitaremos más adelante.

La niña se acercó con un gran saco, donde había traído algunas armas de fuego y granadas para la ocasión.

–¿Cómo es que una niña pudo entrar y no ser vista?–. Sintió curiosidad por la niña.

–Tengo mis propios métodos bajo la manga para conseguir lo que quiero.–. Sonrió malévolamente.

–Como les iba diciendo, al entrar no estaremos solos, pues en cada sector del laboratorio hay un guardia con armas potentes, radios para comunicarse, incluso armas que nos dejaría neutralizados en unos segundos. Todo está vigilado por cámaras de seguridad en movimiento, tenemos que ser lo suficientemente escurridizos para no ser vistos.

–¿Cómo le hacemos para evitar ser vistos por las cámaras de seguridad?–. Pregunto un beta.

–Me parece que son muy tontos como para dejar sin supervisar el medidor eléctrico. Uno de nosotros tendrá que saber cómo desactivarlo.

De inmediato todos miraron al de cabello púrpura.

–¿Qué? ¡Yo no voy a ir!–. Se negó rotundamente.

–Vamos, por algo utilizan lentes los más inteligentes.–. Bromeó, Víctor.

–¿Solo por eso? ¡Soy un doctor! ¡No un espía, detective, agente secreto, hacker o como lo diga la chaviza de hoy en día!

–Hay que intentarlo, uno nunca sabe, Mayito.

–¡Me niego!

–¿Tienes miedo, mayonesa?–. Lo reto, jugando con la mente del otro.

–¿Miedo? ¡Claro que tengo mied...–. Fue silenciado por el dedo índice del alfa.

De tantos gritos sonando a lo lejos puso en alerta a los guardias de seguridad, dejando la puerta principal libre.

–¡¿Qué es lo que hiciste?!–. Gritó bajo el omega menor, escondiéndose entre los arbustos.

Lo mismo hicieron los demás, guardando el máximo silencio posible, ocultando las armas.

Desgraciadamente de nada sirvió esconderse, de todos modos, los guardias ya los habían encontrado.

–¿Esta perdido, jovencito?–.Los descubrió de su escondite, siendo acompañado por tres compañeros.

El más descubierto era Mayo, maldiciendo cada segundo de su vida al haber gritado de más. No tuvo otra opción más que salir a "disculparse".

–Lo siento, es que....creo que me perdí, necesito llegar al lugar seguro antes de que muera aquí.–. Se hizo pasar por una victima.

<<Virus>> ~SPARTOR~ [TERMINADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora