Capítulo. 34

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9: 30. PM

Al fin, ya habían terminado de abrir todas las jaulas, ahora es tiempo de guiar a las personas al lugar seguro, asegurándose de que nadie los estuviera viendo.

Musik, Raptor y Víctor, se ofrecieron para vigilar a los últimos para que lleguen a salvo.

–¿Dónde está Mayo?–. Preguntó Raptor, al no ver por ninguna parte al omega.

–Ya me había olvidado de él, que idiota.–. Se maldijo a sí mismo, prendiendo la radio.–¿Mayo?, ¿Ves a alguien cerca de la zona?

....

El silencio lo dijo todo.

Los dos lo miraron preocupados al saber que tomaron al de lentes como rehén.

–Tengo que volver.–. Siguió más atrás de la fila de híbridos, decidido a arriesgarse.

–¡Espera!–. El alfa reptil lo tomó de su brazo, deteniéndolo.–. No puedes ir solo.

–Tienes razón, un alfa reptil a mi lado sería de gran ayuda.

–¿Y yo que?, ¿no sirvo para esto?–. Musik se sintió ofendido al no tomarlo en cuenta.

–Para serte sincero, nosotros somos los únicos alfas.–. Víctor puso sus manos en los hombros del menor.–. Necesitamos a alguien que este a cargo de mantener seguros a los demás, y a Flex también.–. Sabía muy bien que el omega mapache había llamado la atención al otro.

–Está bien.... Regresen a salvo, los estaremos esperando.

Los dos asintieron y se dirigieron a la zona de seguridad.

Ambos corriendo como si no hubiera un mañana, compitiendo a la vez por quien es el más rápido.

–¿Cómo lo vamos a encontrar? ¡Hay un montón de pasillos!–. Preguntó el pelirrojo.

–No te preocupes, yo sé cómo llegar con Mayo.–. El mapa de la entrada los ayudaría bastante.–. Y tu desarrollado olfato se nos haría aún más fácil encontrarlo.

Al pasar cerca de un estacionamiento donde se encontraban varios autos que de seguro eran de los difuntos guardias, al pelirrojo se le encendió en foco.

–¿Y si al final hacemos que este lugar "explote"?–. Sonrió malévolamente.

–¡Ohhh! ¡Me encanta tu idea! ¿Y como lo haremos?

–En cada auto hay un poco de gasolina de repuesto...¿Mmmh?–. Comenzó a bajar la velocidad al estar cerca de un vehículo.

–Tienes razón, no se porque siempre te llamaban "reptil inútil"–. Se acercó a la cajuela de un coche, encontrándose con varios galones de gasolina.–. Bingo.

–La verdad, yo te guié hasta aquí, pude oler la gasolina.–. Presumió de sus habilidades.

Sin tardar y con algo de esfuerzo, sacaron la gasolina, entraron al laboratorio y mientras buscaban al omega, iban regando por todos los pasillos el líquido.

–Ya estamos cerca.–. Informó el alfa reptil, sintiendo más fuerte el aroma a durazno.

Unos pasos de escucharon acercarse, pero Raptor no se detuvo. Esto le preocupo muchísimo a Víctor.

–¿Escuchaste eso?–. Un tipo dejó de caminar.

–¿Y que? Tenemos armas, nada nos puede....–. A lo lejos pudo ver a una criatura con cola, pues digamos que nunca se había interesado en saber para quien está trabajando o en qué arriesga su vida para mantenerlo seguro.

<<Virus>> ~SPARTOR~ [TERMINADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora