Capítulo 23

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"Si mis palabras pueden meterme en problemas, como escribes Jules, es tu temeridad la que puede hacer algo similar por ti. Así que, ¿qué te parece si yo cuido mi lengua y tú tu cabeza? Eso dejará tranquilos a gran parte de los pobladores de Artem, que aún dependen de ti y confían su futuro en la bondad de tu regencia y en la inútil prudencia de mi presencia a tu lado." (extracto de una carta de Soleil Saint-Clair a su hermano Jules Saint-Clair, cuando ella se encontraba en una visita a la Corte).


–¿Robin?

Él había desviado la mirada hacia el fuego y lentamente retiró su mano tras las palabras de Soleil.

–No hay mucho que decir. Ella murió. Fue una tragedia.

–Ah.

–¿Por qué quieres saberlo?

–¿Hablaste alguna vez de ello?

–¿A qué viene esa pregunta?

–Quiero conocerte.

–Y la mejor manera para hacerlo es preguntándome por... eso.

–Lo lamento. Es... no sé por qué lo dije.

–¿Sabes algo de cómo murió?

–Sí.

–¿Quién te lo dijo?

–Weston.

–Ah.

–¿Por qué? ¿Acaso hay alguien que...?

–Pensé que... había sido Heath.

–¿Qué tiene que ver tu hermano en esto?

–Heath es mi mejor amigo. Él lo sabe todo. Y... cómo ustedes estaban comprometidos...

–No hablamos de ti... de hecho, nunca hablamos mucho... sobre nada.

–Ah –Robin se removió en la silla, inquieto– eso puedo entenderlo.

–¿Qué quieres decir?

–Supongo que nunca son sencillas las uniones matrimoniales, pero son especialmente difíciles cuando son arregladas.

–¿Acaso hay de otro tipo?

–A veces... supongo.

–Te casaste por orden del rey.

–Sí.

–Con una muchacha de la Corte.

–Sí.

–¿Te enamoraste de ella?

–¿Importa? Está muerta.

–Dioses... lo siento.

–¿Qué exactamente?

–Yo no quise... –Soleil miró hacia la ventana– no debí preguntar.

–¿Sientes curiosidad? ¿Sobre la muerte de mi primera esposa?

–No hablas de ella. Nadie aquí lo hace.

–Sucedió hace tiempo. Pasaron muchas cosas.

–¿Hablas de ella con tu hijo?

–Sí. Es su madre.

–¿Y de...?

–No.

Soleil se sorprendió de la sequedad contenida en esa sílaba. No había terminado, pero él había intuido que le preguntaría... sobre su otro hijo.

Dos historias (Drummond #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora