Capítulo 11

1 0 0
                                    

Giuliano

Dejé de pensar en mi pelea y en todo lo relacionado a Avril. Lo mejor era eso, olvidarme de ella. No es capaz de entenderme y no puedo esforzarme en que lo haga. Varias peleas ya hemos tenido por esa razón, ella piensa que yo puedo darle todo y no. Sabe sobre mis inseguridades y juega con ellas como si fuera su marioneta.

Pero a pesar de todo... la sigo amando. Sigo amando sus besos, sus caricias, su sonrisa, sus ojos, cada parte de ella.

Pero tampoco puedo dejar de pensar en Vlair, besa salvajemente y me hace sentir el placer de la mejor manera posible.

Por eso, cuando Avril me llama, no puedo rechazar la llamada aunque me castigue por aceptarla.

—Giuliano.

—Avril.

Los dos nos decimos los nombres, ni siquiera nos saludamos.

—Perdoname.

Necesito más de Avril, necesito algo más de ella.

—Te perdono, por favor, perdóname a mí ¿sí? —parezco insistente y desesperado, pero a veces me vuelve loco de amor—. Dejemos todo atrás y separemos nuestras peleas. Filtremos nuestra relación hasta dejar solo lo mejor de nosotros. Quiero verte, anhelo verte ¿estás en tu casa?

—Giuliano, no me has dejado hablar —tenía razón— lo que te quería decir es que estoy en el hospital.

Una ola de miedo sacudió mi interior.

—¿Qué te pasó?

—¡Déjame hablar, por favor!

Dios, parecía un inmaduro interrumpiendo a cada segundo.

—Me tienen internada, en una sala, porque luego de nuestra pelea... —¿qué había hecho?— casi termino desangrada.

—¿Qué? —no tenía razones para hacerlo, además alguien la tendría que haber ayudado. No, estaba sola en casa. Yo tendría que haberla ayudado.

—Esa llamada de esa noche era para pedirte ayuda. Mis manos estaban tan ensangrentadas que apenas pude abrir el celular y llamar a alguien —dios, me sentía horrible por rechazar esa llamada—. Afortunadamente mi mamá llegó poco después de eso. Ya estaba desmayada cuando me encontró.

A ver, no era mi culpa que rechazara la llamada. Estaba enojado, ella me había gritado por no ayudarla ¿qué esperaba? Sabía las razones, y aún así había desafiado mi paciencia.

—Discúlpame Avril, te juro que si sabía todo lo que estaba pasando hubiera atendido.

—Sabes que te dije "Siempre que te llame, es por una emergencia" y aún así, en ese momento, parece que lo olvidaste.

Por dios, otra vez reprochándome cosas. —Avril, nos habíamos peleado.

—¿Qué importa Giuliano?, seguimos siendo novios.

Para ella todavía éramos una pareja... por dios.

—No es nuestro mejor momento.

—¿Y? Aún en tus peores momentos dijiste que me ayudarías, que estarías conmigo por siempre.

Cuando hablaba con Avril sentía los polos opuestos que era con Vlair. A Vlair no la veía todo el tiempo, pero ella sonreía. Sin embargo, Avril cada vez que hablaba conmigo últimamente parecía que quería decirme "vete a la mierda para siempre".

—Pareces enojada, no te alteres mucho porque te tildarán de loca en el hospital.

—Cuando dices que parezco enojada, me haces enojar más Giuliano.

woodvaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora