Quédate Lejos de Mí.

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Shikamaru se levantó, se vistió rápidamente tras recordar el suceso de anoche y fue a la ventana mientras Shikadai veía a su padre confundido desde la cama mientras buscaba su ropa interior.

Estoy celoso – Respondió inmediatamente Shikamaru pues sabía que su hijo quería una respuesta.

Celoso ¿Por qué? Solo soy tu hijo, ya me lo dejaste claro – Dijo Shikadai recordando estas últimas semanas sin él.

Temari y yo siempre dormíamos así, pero en todo este tiempo no hemos tenido nada – Dijo Shikamaru desviando la mirada llamando la atención inmediatamente del menor de los Nara.

¿No? Pero, mamá se veía muy contenta en tu pecho y si es así, ¿Por qué nunca quisiste volver a dormir conmigo? – Preguntó intrigado el menor.

Shikamaru prendió un cigarro y empezó a relatar

Tengo miedo si... - Dijo el mayor de los Nara – miedo a perderte.

Shikadai solo vio confundido a su padre ¿De qué está hablando? ¿Cuál es su miedo?

Si tu madre se llega a enterar de los que tuvimos, no me dejará verte ni nada – Dijo Shikamaru con una mirada triste y melancólica.

Mamá no es así, hasta le hice una... - Intento explicarse el menor, pero fue interrumpido

Se lo que le preguntaste, me lo contó, pero una cosa es alguien externo y otra cosa muy distinta es tu propio padre Shikadai – Dijo mientras miraba por la ventana intranquilo.

Shikadai se quedó callado ante tal respuesta.

Tu madre no es como Hinata, ella es una de las mujeres más lista de esta aldea, y también de la aldea de la arena, ella se puede dar cuenta de lo que pasaba si venía a tu cuarto o me quedaba a dormir contigo a todo momento – Respondió Shikamaru

Eso no es verdad – Dijo Shikadai

Shikamaru se quedó callado y fue a su cama sentándose al lado de él.

Yo quiero a tu madre... fue una de las mujeres más importantes para mí, pero no creo amarla como antes... no desde que bueno... - Dijo con una sonrisa leve el Nara mayor – estamos juntos.

¿E-e-stamos juntos? – Preguntó Shikadai feliz con lágrimas en los ojos.

Bebé no quise causarte dolor ni problemas... pero ya no puedo actuar tan cariñoso contigo o los dos nos meteremos en muchos problemas – Dijo Shikamaru sonriendo levemente.

Shikadai se quedó callado

¿De verdad ya no sientes lo mismo por mamá? – Preguntó jugando con sus manos nuevamente.

No... la quiero no te lo niego, pero ya no es el amor de antes – Respondió sinceramente el pelinegro.

¿Entonces por qué dejas que todavía se quede en tu pecho durmiendo? – Preguntó Shikadai cruzándose de brazos.