Capítulo 101: Hagamos una apuesta.

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Parte 1.

*POV 3ra Persona*

La suave brisa acariciando sus mejillas revolvió la conciencia de Leohart, causando que se despertara.

"Ugh..."

Abrió los ojos y se encontró con que estaba acostado mirando hacia el cielo azul. Totalmente despejado y en paz total. Sintiendo la suave brisa, lentamente su mente se aclaró y pudo percatarse de que algo estaba mal con su situación actual.

"Parece que despertaste."

"Hm... ¿Qué esta situación?"

La voz que lo recibió fue la de Kanna, quien lo miraba de frente. Como su rostro se veía al revés y sentía una sensación bastante suave en su cabeza, Leohart entendió que estaba usando su regazo como almohada, lo cual solo le causó mayor confusión.

"Si ya despertaste, muévete ¿quieres?"

Al escuchar a Kanna decir eso, con una sonrisa no tan amigable, Leohart se levantó de un solo salto.

"¿Qué es esto? ¿Dónde estoy y como terminé en esta situación?"

"¿Qué situación?"

"Contigo usando tu regazo como una almohada para mí... yo debería estar en la última área de la mazmorra... herido y... ¿hm?"

Mirando con detenimiento sus alrededores, Leohart podía ver claramente que las montañas que destacaban maravillosamente en la sexta área de la mazmorra ya no estaban. En cambio, el paisaje era el mismo que el de la zona a través de la cual se llegaba a las entradas de las seis áreas. Y, por otro lado, se examinó a sí mismo y notó que todo el dolor que había sentido se había ido y no tenía ninguna herida.

Al analizar toda la información disponible, llegó a una sola conclusión...

"Ya veo... estiré la pata ¿cierto?"

"..."

Al escuchar su respuesta, Kanna soltó un largo suspiro y lo miró con una expresión burlona.

(Esa es una expresión que nunca había visto en ella.)

"En serio... ¿Cómo llegaste a esa conclusión?"

"Entonces, ¿qué pasó exactamente?"

Preguntó Leohart confundido.

La respuesta fue bastante sencilla. Una vez que el grupo de Selene terminó de limpiar a los monstruos en la quinta área, se dirigieron rápidamente hacia la sexta debido a que una de los primordiales dijo haber visto algo preocupante con sus habilidades.

Para el momento en que llegaron, se encontraron con una escena confusa. El cadáver de un dragón gigantesco yacía tirado al pie de la cordillera, partido en dos desde su cabeza hasta el centro del cuerpo y tirado frente al cadáver estaba Leohart, durmiendo tranquilamente con varias quemaduras en su cuerpo y su ropa dañada.

A pesar de lo extraño que se veía, estaba claro que todo había terminado, por lo que recogieron a Leohart, trataron sus heridas, que al parecer eran más que quemaduras superficiales ya que tenía varias fracturas, y salieron del área después de encontrar y recuperar la gema de maná.

"Ha pasado poco más de un día desde entonces."

Dijo Kanna, culminando su historia.

"Ya veo... tiene sentido."

"Si lo entiendes, ¿Por qué aun pareces confundido?"

Las dudas aun no desaparecían del rostro de Leohart, quien aún miraba a Kanna confundido.

Empecé como serpiente, por lo tanto empecé desde abajo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora