Empecé como serpiente, por lo tanto empecé desde abajo.

Capítulo 126: Visita nocturna.

Parte 1.

*POV 3ra Persona*

“La ciudad cambiará…”

De regreso en el templo en la ciudad de los elfos, Isis, de pie en el balcón de su habitación observaba la ciudad.

Cinco días pasaron desde que los nuevos residentes vieron a Leohart en su forma de dragón. Durante ese tiempo finalizó su organización y ahora solo faltaba esperar a la primavera para comenzar la mudanza de aquellos que obtuvieron residencias de inmediato y para la expansión de la zona residencial de la ciudad destinada a acomodar a aquellos que aún no tenían un techo propio.

Durante ese tiempo también se determinó el área en la se asentarían los Leonids. Se había seleccionado un área al este de la ciudad de los elfos, justo al pie de la cordillera. El área era boscosa y con mayor humedad, lo cual parecía agradarles.

La distancia con la ciudad de los elfos era poca, por lo que contaría como que la ciudad de los elfos se expandiría, convirtiéndose en una ciudad en la que convivirían los elfos, los Leonids y una parte de la población de los enanos.

Mientras repasaba en su mente una de las decisiones gubernamentales más recientes, Isis sonrió levemente.

“Las luces nocturnas son hermosas.”

Ya había pasado la media noche y aun así la ciudad en el bosque se veía hermosa gracias a la iluminación de las calles. La luz hacia brillar las hojas de los árboles, causando que no solo las calles estuvieran iluminadas, sino que también se creara un bello efecto visual, con los arboles meciéndose suavemente con la brisa nocturna durante esa noche en la cual la luna no brillaba en el cielo.

“Bueno, supongo que ya tuve suficiente para refrescarme. Mejor regreso.”

Llevaba alrededor de media hora en el balcón, disfrutando de la brisa, ya que no podía dormir. Después de todo, llevaba un buen tiempo sin usar su habitación en el templo ya que pasaba mucho tiempo en la mansión de Leohart y por ello se sentía algo incómoda al volver.

Mientras se daba la vuelta, Isis percibió un par de breves destellos de luz provenientes de un rincón del jardín del templo.

“…”

Entendiendo el origen de la luz, Isis suspiró brevemente y sin prestarle otro segundo de atención, ingresó a la habitación.

Parte 2

Minutos antes, en el borde sur del templo, emergieron desde la oscuridad del bosque ocho figuras humanoides vestidas completamente de negro y con sus rostros cubiertos por máscaras negras.

“El objetivo se encuentra en el segundo piso del templo. Debemos ser rápidos, ¿entendido?”

Comentó uno de ellos y el resto asintió en silencio. Un segundo después, comenzaron a correr a través del jardín en dirección al templo.

Las ocho siluetas se movieron al unísono como si fueran una sola entidad cuando un par de destellos de luz atravesaron las frentes de dos de ellos.

“¡¿…?!”

Ambas figuras cayeron inertes con un sonido sordo, causando un breve instante de confusión, pero a pesar de ello no se detuvieron y continuaron corriendo, atravesando el jardín en pocos segundos.

“Ese ataque de antes… parece que ya hemos sido descubiertos.”

Comentó una de las figuras.

“No será un problema. Es muy probable que sea obra de Aura. Esa elfa oscura es uno de los problemas que tenemos que superar para poder capturar al objetivo, pero es solo ella. Sus subordinados no deberían ser un problema para nosotros.”