Emma Brown es una joven pintora y estudiante de Bellas Artes. Su vida está llena de colores, pinceles y lienzos, y su mundo gira en torno a la creación de belleza a través de su arte.
Por otro lado, Alessandro Ricci es el líder de la mafia italiana...
" Las personas frías tienen un corazón cálido, sólo necesitan encontrar a alguien que pueda ver más allá de su armadura "
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Narra Alessandro
Me encuentro en la oficina del club, ocupado en el proceso de reorganización de varios documentos y poniéndome al día con algunos asuntos de la empresa. Mi hermano, Nicolás, me aseguró que todo estaba funcionando bien en los clubes, lo cual me tranquiliza, especialmente porque no podré regresar a Italia por el momento.
El jueves tengo programada mi segunda reunión con James. Vamos a revisar los planos de los nuevos hoteles y empezar con los preparativos para las construcciones. Lo único que me retiene en este país es Emma. Si fuera por mí, mandaría a Killian a todas esas insoportables reuniones.
Tomo mi teléfono y marco el número de uno de mis hombres que está encargado de cuidar a Emma. Inmediatamente contesta.
-Hola capo, ¿se le ofrece algo?- responde y le pregunto sobre Emma.
-¿Cómo está Emma? ¿Todo va bien?- A lo que responde - Sí capo, la señorita Emma se encuentra bien. En estos momentos está conversando con un hombre - Le agradezco la información y respondo.
-Perfecto, voy enseguida - respondo
No pienso dejar que otro me gane a Emma, eso sí que no, así que hago lo más sabio que haría cualquiera, ir a verla.
Me levanto rápidamente y salgo de la oficina. En el pasillo me encuentro con Killian.
- Alessandro, ¿a dónde vas? Tenemos una reunión en unos minutos - me informa y le respondo con decisión.
-Encárgate tú, Killian, iré a ver a Emma - sigo e ignoro cualquier respuesta que pueda tener y salgo enseguida, subiéndome en mi auto seguido de mis escoltas y tomo rumbo a la Universidad.
En el trayecto, hago una parada en una floristería para comprarle un ramo de rosas rojas a Emma. Espero que le guste porque no haría esto por cualquiera, así que retomo mi camino con la intención de verla lo más rápido posible. Estaciono en el garaje de la Universidad, donde veo a Emma saliendo muy alegre al lado de sus amigos, seguida por mis hombres.
Me acerco a saludar.
-Camilla, Lucas, ¿cómo están?- saludo a ambos antes de dirigirme a Emma - Emma, bonita tarde. -La saludo besando su mano.
Camilla responde alegremente,
-Qué alegría verte, Alessandro- responde mientras Lucas me estrecha la mano en forma de saludo.
Emma, un poco sorprendida, me pregunta.
-Hola Alessandro, ¿qué haces aquí?- Le extiendo el ramo de rosas - Para ti, pequeña Emma- Veo cómo se ruboriza al instante y sus amigos están sonriendo pícaramente.
Así que veo a Lucas intervenir para despedirse.
-Nosotros ya nos íbamos, que tengan una buena tarde - responde pero Camilla se queja.
