Kang ji-yoon comienza a descubrir que no veía como un hermano mayor, al mejor amigo de su hermana, todo era muy diferente. Ella lo veía como un hombre, uno muy caliente y aunque le costara admitirlo...
Estaba completamente enamorada de Jeon Jungkook...
Toda la diversión termino con la llegada de las patrullas policiales, todos huyeron a las cuatro de la mañana, Jungkook - quien recién había comentado que aún tenía su auto-, se encargó de traerme a casa sana y salva.
Su teléfono no dejó de vibrar durante todo el camino, no sabía quién le llamaba con tanta insistencia a esas horas, pero suponía que era alguna de esas tipas con las cuales tenía un polvo y luego las desechaba cuál basura.
Ni siquiera podía incluirme al club.
— Si quieres lo pongo en silencio.— me ofrezco «amablemente» camuflando mis ganas de ver el nombre que alumbraba la pantalla. Jungkook, quien trata de estacionarse correctamente en la cochera asiente.
— Te lo agradecería mucho, corazón.— me da el permiso necesario y tomo su teléfono, el cual estaba guardado en el bolsillo delantero del pantalón. Nerviosa de tocar más de lo necesario consigo tenerlo y no puedo evitar levantar ambas cejas al ver la pantalla.— debe ser Ji-eun, está muy insistente.
— ¿Por qué?— no logro aguantar las ganas de averiguar por qué lo llamaba a esas horas, él por su parte apaga el motor del coche y voltea a verme con ligera seriedad.— Es decir, ¿No es muy tarde?, debe ser importante.
— Está preocupada por ti, no le contestas el teléfono y piensa que te he llevado conmigo.— muevo mis dedos con rapidez, rechazando la llamada y coloco su teléfono en silencio.— Ji-yoon, tu hermana no puede saber que te he llevado a una pelea, se enojará si se entera…
— Entiendo, tampoco tengo que darle explicaciones de lo que hago.— sonríe un poco y me guiña un ojo de forma coqueta.
— Esa es mi chica.
Su chica…
Sonaba muy bien cuando él lo decía.
— Bueno, creo que es hora de ir a dormir… Es tardísimo y tengo instituto.— abro la puerta del asiento copiloto con una pequeña sonrisa de satisfacción, pero su mano rodea mi muñeca antes de poder salir.
— Ji-yoon, yo…— vuelvo a sentarme, atenta a sus palabras.— solo quería advertirte sobre lucia, es un poco chismosa, no le prestes tanta atención cuando te cuente algunas cosas… Puede ser algo innecesario que te enteres…
— ¿De qué rechazaste a mi hermana?— arqueó una ceja, interrumpiéndolo y escucho perfectamente cuando maldice por lo bajo.
— Eso… Eso no es así.— rasca su nuca con nerviosismo y desvía la mirada cuando lo observo fijamente.— Lucia, no sabe absolutamente nada, Ji-eun solo confundió sus sentimientos, yo jamás…
— está bien, jungkook.— murmuró con una sonrisa fingida.— no tienes que darme explicaciones de lo sucedido, no es necesario.
Parecía sorprendido ante mis palabras, pero aclara la garganta y asiente silenciosamente. No me sentía preparada para escucharlo y él no parecía cómodo hablando del tema.
— De acuerdo, ve a descansar…
Salgo del coche dejándolo solo e ingreso a casa. Subo las escaleras directo a mi habitación y antes de ingresar el silencioso ambiente da a conocer que Jungkook no tenía planeado ingresar a casa aún, probablemente estaba fumando un cigarrillo tratando de ordenar los pensamientos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
