𝐇𝐀𝐏𝐏𝐈𝐄𝐑

Capítulo 21

— ¡Oye, chica!, Pero que belleza eres — lo dice con una voz más grave y niego con la cabeza, llama la atención de muchas compañeras, pero me vale una mierda, pues, la suya está solo en mí.— ¿Quieres una jalada, guapa?

— ¿Y a ti qué te dio?— pregunté mientras me acercaba al auto, me guiña un ojo y su comportamiento me divierte.— ¿Está coqueteando conmigo, señor anciano?

— ¿Señor anciano?, stop ahí Honey— me detiene y mueve la cabeza.— Anda sube, hoy tenemos una tarde ocupada, tengo todo planeado y alguien nos va a acompañar.

Por los ojos brillosos de emoción y la gran sonrisa, supongo que es una persona especial, subo al auto y abrocho el cinturón de seguridad bajo la atenta mirada de Jungkook, al terminar se inclina solo un poco y deposita un beso en mi frente.

— Usa el cinturón también — pido al notar que no lo lleva y chasquea la lengua.— ¿Sabes los casos diarios de accidentes automovilísticos que se presentan?— digo algo molesta y noto como se tensa por un momento.— No te enojes, te estoy cuidando jeon.

— No estoy enojado…— niega y se coloca el cinturón de seguridad.— ya, ¿Contenta?— me da una mirada y al verme asentir pone el auto en marcha.

— ¿Quién es la tercera compañía?— pregunté.

— Logré convencer a mi madre, me ha dejado sacar a Jang-mi aunque la cría está enojada por lo de ayer… Le he prometido enmendarlo.— vuelve a relajarse y también siento alegría de tener a la pequeña por una tarde.

— Me partió el alma verla, ayer así, te quiere muchísimo… Eres su todo.— la radio llama mi atención y me acerco a esta.

Era tan estúpida para algunas cosas, por ejemplo usar la radio de los coches, pues el coche de mi padre tenía una jodida tableta que se manejaba con facilidad.

— Sí, después de la muerte de sus padres solo quedamos nosotros y está más segura cuando estoy con ella, para ella soy su héroe sin capa.— cuenta y quita mi mano de la radio como de costumbre.— ¿Nunca puedes estar quieta?, pondré la música por ti.

Presiona un botón en específico y presto atención, busca música buena mientras con una mano gira el timón cambiando de calle.

¿Ya había dicho lo sexi que se ve Jungkook manejando?

— Esa, es de un nuevo cantante — lo detuve, obedece y vuelve a su labor de conducir tranquilamente.— Se acerca tu cumpleaños, ¿Qué planeas hacer?, ¿Una fiesta?, ¿Salida?, ¿Comida?, ¿Club?

— Comer y dormir, eso, planeo hacer. Tienes una invitación especial, si aceptas podemos comer Naengmyeon y dormir juntos… Y si no aceptas dormiré todo el día.

— ¿Por qué comer y dormir? ¿Eh?, de ninguna manera…— niego con la cabeza y suspira.

— En realidad he dejado de celebrar mi cumpleaños desde los dieciocho… Es un día más.— murmura y detiene el auto frente al hogar de sus padres. La curiosidad comenzaba a crecer y él me conocía mucho.— No preguntes, ¿Aceptas o me vas a rechazar?

— es obvio que acepto, Jungkook.

— Muy bien, prepararé muy bien la cama, desde ya.— bromea y presiona el claxon. Después de ayer entendía que no quisiera entrar a esa casa.

— Qué considerado eres.

La conversación termina cuando una Jang-mi muy bien arreglada sale corriendo directo al coche, lleva un bonito vestido y el cabello recogido en una cola alta.

— Mira nada más, una princesa de lo más hermosa…— Jungkook lleva la mano al corazón dándole más drama.— Tendré que espantar muchos chicos en unos años, le pediré la escopeta a la anciana.