El público comienza a contar en regresiva formándose un coro unísono en todo el estadio, son los segundos que faltan para que la figura más importante del equipo ingrese al campo, los gritos vitoreando su nombre alimentan su ego, su figura imponente sale al campo, camina de manera segura y arenga al público para que aumenten el volumen de sus gritos.
Mientras Joe observaba el partido grabado, una imagen en las pantallas del estadio capturó su atención de manera inesperada. La mujer que apareció en la transmisión, con su inconfundible camiseta de los Bills, hizo que Joe se desconcentrara por completo, dejándolo con una inquietante curiosidad que no podía ignorar.
Para el mundo, Joe es una figura ejemplar, de los mejores en en su rango los últimos años, sus números lo comprueban.
Con un matrimonio sólido que está apunto de cumplir cinco años. Está casado con su mejor amiga de la universidad, una mujer amable, que lo apoya incondicionalmente y que lo ama con todo su ser, están juntos desde sus primeros años en el fútbol universitario.
Para la prensa son un feliz matrimonio con posibles rumores de agrandar la familia, pero en su lujosa mansión de Cincinnati él deja a un lado esa fachada para irse a un departamento de "soltero" en el centro de la ciudad donde una mujer distinta lo espera, esto sucede dos o tres veces al mes.
Sarah, aunque consciente de las escapadas nocturnas de Joe, trata de mantener la fachada de un matrimonio feliz. La disociación entre la imagen pública de Joe y su vida privada es un velo que ambos mantienen, a pesar de las traiciones que se ocultan detrás de la aparente estabilidad.
De alguna manera la prensa no se ha enterado de la vida oculta del Quarterback mejor pago de la liga, pero en una ciudad como Cincinnati, el rumor de que Joe Burrow es un casanova es algo que ha estado rondando desde sus años como estudiante de secundaria hasta la actualidad, los rumores más fuertes sonaron cuando el dejo Ohio State para irse a LSU, las malas lenguas comentaban que se divirtió con muchas universitarias en Baton Rouge, mientras que Sarah lo esperaba como siempre en Cincinnati.
Pero siempre fueron rumores, no hay fotos, ni testigos, ni chicas que hayan dicho que estuvieron con él, son simplemente rumores.
Cuando se trata de partidos importantes Joe siempre suele estar concentrado al cien por ciento en el juego, pero su mente le jugó una mala pasada ese día, por un segundo decidió mirar las pantallas del estadio, al verlas se encontró con una mujer que no puede describir con palabras, ya que tan solo al verla su mente se puso en blanco, tal desconcentración hizo que el asistente defensivo, que le pasaba los balones en la práctica, lance un balón directo al rostro de Joe.
A pesar de la leve contusión Joe siguió el partido un poco desconcentrado pero buscando con la mirada, disimuladamente, a la mujer de sus sueños. Joe era consciente de que en el estadio estaba su esposa, él es un hombre casado, pero eso nunca le impidió intimar con otras mujeres y esta ocasión no sería la excepción.
Lo único que recordaba de esos pocos segundos que la vio en pantalla era que vestía una playera de los Bills con el número 86 impreso en la camiseta, así que esa noche al volver a casa se puso a investigar, encerrado en el baño buscaba ansioso más información de esa magnética mujer.
Su primer idea fue buscar en las etiquetas del jugador número 86 de los Bills, muchas veces algunas chicas suelen querer llamar la atención de atletas de alto rango etiquetándolos en sus posteos, tal vez esta mujer era un de ellas. Joe sintió una mezcla de sorpresa y excitación al descubrir a Camille en el perfil de Dalton Kincaid. La conexión entre la mujer que lo había deslumbrado en la pantalla del estadio y el conocido Tight End de los Bills encajaba perfectamente en su esquema. La revelación intensificó su determinación de llevar a cabo su plan, haciendo que su corazón se acelerara con la anticipación de lo que estaba por venir.
Joe siempre había considerado que las mujeres de amigos eran territorio prohibido. Sin embargo, con Dalton Kincaid siendo un conocido más que un amigo cercano, su conciencia se volvió flexible. La intriga por Camille fue suficiente para que Joe trazara un plan meticuloso para acercarse a ella, una estrategia calculada para convertir su deseo en realidad.
Joe sabía que al terminar esa temporada Dalton se volvería un agente libre de la liga, los Bengals tenían la mira en otro Tight End pero Joe apareció en la junta entre los directivos y los coaches del equipo con un buen discurso de porque Dalton Kincaid era un buen prospecto para el equipo, algo que de alguna manera convenció a todos los presentes.
De alguna manera el plan de Joe había funcionado ya que meses después le confirmaron el reclutamiento de Kincaid.
—Dalton acaba de firmar el contrato, para serte sincero el ni siquiera es tan buen jugador, pero tendrás una razón para querer tenerlo en el equipo, espero que sea una buena decisión porque hay mucho dinero en juego Joe—dijo Zac en la videollamada.
Joe se dio cuenta de que el destino de Dalton en el equipo estaba sellado, al igual que el suyo en el plan que había tejido. Aunque sabía que sus acciones podrían tener repercusiones serias, su mente estaba enfocada en la oportunidad que tenía delante. Las consecuencias eran un riesgo calculado, una parte inevitable del juego que estaba dispuesto a jugar.
—Confía en mí... —Joe sonrió al ver el mensaje de Camille en su teléfono—esta temporada es mía...
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Illicit Affairs | Joe Burrow
FanficDonde Joe y Camille se involucran en una complicada relación. [EDITANDO] PROHIBIDA LA COPIA Y/O ADAPTACIÓN PARCIAL O COMPLETA DE ESTA OBRA