"— ¡Papá, papá! Mirá, hice una flor en origami.
Un pequeño niño azabache corría hacia su padre, quién leía un libro sobre la Tefilah. Se veía serio y algo molesto por haber sido interrumpido en su sagrada lectura del estudio de la Torá. Apenas llegó frente a él con la flor su padre lo miró mal.
— ¿Quieres que te felicité por eso? Gabriel, no eres un omega al que le guste hacer ese tipo de cosas. Debes ser fomo Michael, un buen niño que estudia la Torá y la pone en práctica. Michael es...
Desde que tiene memoria, siempre ha oído escuchando las comparaciones entre ellos. Siempre fue visto como el que no hace nada por la familia, cuando mayormente era el otro, el gemelo de Michael. Lucifer, quién no hacía nada más que meterse en problemas. Siempre haciendo caos y siempre siendo mimado.
— Lucifer, eres tan lindo hijo mío.
Él, después de su gemelo, Michael. Es quien más recibía elogios de Elois, su padre. Siempre fue al que le daba todo sin miramientos o excusas, pero siempre que era él... Siempre ocurría algo...
— ¿No eres un alfa? Puedes conseguir un trabajo digno de la familia y darte tus propios lujos, Luzbel es el único que debe recibir todo por ser omega. No seas egoísta con tu hermano menor.
Siempre Lucifer era salvado de todo, siempre era lucifer el bueno de todo... Siempre era Lucifer ante los ojos de su padre, y claro, Michael también. Él no era más que una mancha negra como su cabello, heredado por su madre. Qué da la casualidad le dió un hermano que no le caía bien, siempre seguía a Lucifer y a Michael a todos lados, era un niño bastante risueño... Azrael Magne era igual que él, pero tenía algo que Gabriel no. Libertad, era le menor, y tal como Lucifer hacía. Él siempre se salía con las suyas.
— No debes meterte en lo que tus hermanos menores hacen, enfócate en estudiar la Torá para la Parasha del domingo.
Siempre fue hecho a un lado. Siempre preferían a Lucifer y a Michael... Pero nunca a él.
¿Por qué le tocó ser la tercera rueda de una bicicleta de dos? No es más que un reemplazo, y eso lo supo cuando lucifer fue echado de la familia.
Toda la presión y atención recayó en él.
Aunque... Ahora que lo piensa...
¿No fue todo culpa de su padre por no amar a todos de la misma forma?
Ah, es verdad.
Nunca se ama a todos de la misma forma.
No se podían ver sus piernas, estaba corriendo como alma que lleva el diablo. Su respiración irregular y cortante hace que su equilibrio y enfoque sea mal, muy malo... Incluso ha roto varias piezas de cerámica que cuestan un ojo de la cara si no tienes el dinero para pagarlo. Pero eso no es lo que le importa ahora, escuchá pasos a sus espaldas mientras que gritos llenan por todo el lugar; podía escuchar el dolor y la desesperación de los hombres que había contratado, los supuestos mejores hombres de ese tal Striker.
¡Antes de pensar en cualquier otra cosa debe pensar en dónde debe esconderse para que Lucifer y ese maldito loco de lentes no lo encuentren!
Sus piernas pierden fuerza cuando llega al Ala norte del segundo piso de la mansión, no hay nadie, ni siquiera los sirvientes que se supone deberían estar limpiando y quizás arreglando las habitaciones de los invitados que se quieran quedar en la mansión para una buena charla con el dueño.
Cayó de rodillas mientras que escuchaba los pasos detrás, cada vez más cerca. Sus ojos buscaban con desesperación una puerta abierta, ya que la mayoría tenían llave. Sus ojos no dejaron de moverse hasta que vio una medio abierta.
ESTÁS LEYENDO
Un Omega en Manhattan [RadioApple]
FanfictionDespués de haber muerto a manos de Lilith, la vida mortal de Lucifer Morningstar no es color de rosa...