Teddy: Mi bebé Grey Parte II

Capitulo 11 "Viejos Amigos"

CAPITULO 11 

Abro los ojos al escuchar ruidos en el pasillo, reviso la hora en mi teléfono y son casi las tres de la mañana. Salgo a ver qué es y me encuentro a Christian intentando abrir la puerta de nuestra habitación, esta borracho, sin duda.

— ¡Christian! — lo llamo.

Se vuelve hacia mí y me observa por un momento sin dejar de intentar de abrir la puerta.

— ¿Dónde estabas? — le pregunto. Justo en ese momento la puerta se abre lo que hace que casi se caiga pero se logra detener.

Se acerca a la cama y comienza a quitarse los zapatos, o lo intenta. En el estado en el que esta dudo que lo logre.

—Christian responde. ¿De dónde vienes y porque así borracho? —

—Eso es información clasificada...— dice con su voz de ebrio a medio entender.

—Por favor, no seas ridículo y dime, ¿dónde has estado todo el día?...

—Bien que sabe Srta. Steele... ¿Cree que no me di cuenta de que me siguió? — Me quedo sin palabras al escucharlo. ¿Pero como rayos se dio cuenta si Sawyer es un experto en esto? —Usted no confía en su esposo Srta Steele... tiene que seguirlo y de una manera muy poco profesional...

—Eso no responde mi pregunta.

—Shh... tranquila. No estuve con Elena, estuve con Tommy...

—¿Y quién es "Tommy"?— pregunto sorprendida. Logro quitarse los zapatos, se acomodo en la cama, ya no escuche ningún sonido de él mas que el de su respirar.

Christian ya se durmió y sin contestarme, me molesta tanto que llegue en este estado y quien rayos es Tommy.

Regreso furiosa al cuarto de Teddy, esto no se va a quedar así, el y yo tenemos una conversación pendiente.

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Son casi las diez de la mañana ya mi bebé comió y ahora está entre mis brazos, despierto y observándome.

— ¿Quieres ver a papá? — le hablo y una hermosa sonrisa aparece en su pequeño rostro.

Abro la puerta de golpe y que sorpresa, Christian aun sigue dormido.

—No deberías ver a papá así Teddy, pero necesito tu ayuda, tal vez tú puedas despertarlo. — Coloco a mi pequeño a lado de él y con mucho cuidado, no quiero de pronto pueda darle un golpe sin querer.

Teddy hace sus lindos soniditos de bebé pero no funciona

—Christian...— comienzo a llamarlo. —Christian...— y no responde. Comienzo a moverlo y nada sucede.

Tomo a Teddy entre mis brazos, tomo el vaso que esta e la mesita de noche, voy lo lleno de agua al baño y regreso tirándole sobre su rostro.

— ¿Qué mierd... — se levanta exaltado, gritando y mirando hacia todos lados. Después de unos segundos enfoca su mirada hacia mí. — ¡Qué demonios te pasa Anastasia...!

—Es tarde, levántate ya... — le digo en tono frio y salgo de la habitación.

No puedo creer lo que acabo de hacer, pero se lo merece por el estado en el que llego.

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Ha pasado casi una hora, Teddy se durmió y esta en su cuna muy tranquilo, salgo de su habitación y decido ir a ver que sucedió con Christian que no ha salido.

Entro y lo veo sentado al pie de la cama con el teléfono en mano, ya vestido y con el cabello húmedo, señal de que se dio un baño.

—¿Puedes explicarme porque llegaste así anoche Christian? — le pregunto elevando mi tono de voz.