Do it for the Vine (OldMagCon, Cameron Dallas) EDITANDO

Capítulo 31.

-¿Gilinsky?-rió.

-Cameron, ya no...

-Si lo hubiera sabido antes le daba una charlita...

-Cam.

Estaba perdida. Yo solo quería dejarle claro que ya estoy bien y le hablo como antes. Ya no hay rencores. Además él nunca se enteró de mi pequeño enamoramiento.

-Cameron, cálmate.

-¡¿Cómo quieres que me calme?!

-¡Yo que sé, no soy psicóloga!-Cam suspiró.

-Lo siento.-tiró de su pelo.

-No te irrites tanto. Lo he superado.

-Pero es que...

-Es que nada. ¿Ves porque no quería decírtelo?

-Bésame.

-Wow, wow, wow.-me besó-Bipolar.-dije antes de volver a besarle.

Entre beso y beso el tiempo se me pasaba. Todo era perfecto a su lado, tal y como siempre lo había imaginado. Oí un ruido pero no le di importancia hasta que oí a Dani gritar.

-¡Dallas! ¡SEPARA TUS SEXYS LABIOS DE LOS DE MI MEJOR AMIGA!

-¡AAAAH!-gritó Cameron al ver a Dani.

-¡AAAAH!-grité yo-Dani, ¿qué le ha pasado a tu pelo?

-¿Te gusta?-dijo atusandose su larga cabellera, ahora azul.

-Sí, ese tono de azul te favorece... Espera, ¡HAS LLAMADO SEXYS A LOS LABIOS DE MI CAMERON!-grité destacando el mi.

-Oops.-la peliazul salió corriendo y yo detrás.

Le seguí por todo el pasillo del hotel hasta alcanzarla y tirarme encima suyo. Estaba a horcajadas sobre ella.

-Lo siento Esterilla.

-No lo arreglas, Sebastiana.

-¿Sebastiana?

-¡PENSAR RÁPIDO NO ES LO MÍO!

-De acuerdo, lo siento señorita Ester Dallas Lee Espinosa II.

-Como me has honrado por ser de la familia de mi rey Pinkie Pie y Cameronsito, te perdono.-me levanté y ella salió corriendo hacia el infinito y más allá. (A saber a dónde)

Volví a la habitación y lo que me encontré nadie se lo puede explicar. Estaban Cameron, Nash, Hayes y Carter encima de la cama de Dani cantando De noche y de día. Imaginaos. Cerré la puerta despacio y comencé a andar de espaldas hasta la otra pared del pasillo y me senté en el suelo con la espalda apoyada en la pared. Oí un grito. Me levanté y observé que venían del cuarto de Carter y Matt. Anduve hasta la puerta (que como siempre estaba entre-abierta) y la terminé de abrir poco a poco.

-Tey voy a comprawr iunas brawguas de cascaibeiles.

-¿Matt?-se giró y gritó como una niña pequeña al verme.

Por lo que podía ver desde el suelo, dónde me encontraba partiéndome de risa a más no poder, Matt acababa de salir de la ducha, pues llevaba una toalla a la cintura y su pelo estaba mojado.

-¿Qué haces aquí, Pandycornia?

-En...mi...cuarto.-no podía para de reír. Respiré hondo y conseguí calmarme-En mi cuarto habían cuatro locos pretendiendo cantar como Enrique Iglesias y te escuché cantar o... ¿gritar?-me encogí de hombros y me senté en la camalimpia de Carter.

-En serio, ¿por qué?-fruncí mi ceño-Vale, me voy a creer esa trola.

-¿Quién te ha enseñado esa canción?

-Ley-ley.

-Me lo suponía...

Suspiramos a la vez.

-Tenemos que hablar.-le dije haciendo un gesto para que se sentase.

-Dime, Pandycornia.

-¡Yo solo soy la Pandycornia de Cameron!

-Vale, vale...-levantó sus manos.

-A lo que voy, ¿por qué últimamente te... duchas?

-¿En serio?-asentí levemente-Me gusta una chica...

-¿¡QUÉ!?-comencé a saltar en la camalimpia de Carter, deshaciéndola, y a vocear-¿Quién? ¿La conozco? ¿Tiene los mismos gusto en dinocornios que tú?

-Sí... La conoces.

-Mmhm ¡Katy Perry!-negó riendo-¿Dani?-negó-¿Alexis?-volvió a negar-¿Carmen Dallas?-volvió a negar con el ceño fruncido-¡La pelopon...!

-¡Sara! Me gusta Sarandonga...

-¿En serio?

Ahora la que estaba confundida era yo. ¿Matt? ¿Con Sara?

-Si quieres... Yo te ayudo a cortejarla. Porque nada tiene más poder que...

-¿El amor?

-No. Ester. Duh!