—Luego de eso, practiqué el supuesto aborto y le pedí a la enfermera que mintiera y dijera que debía pasar unos meses en observación —Explicó el Omega —Cuando lía nació la envié a un orfanato con la condición de que solo fuera cuidada, yo le daría todo desde lejos y bajo un seudónimo, así no enterarían de nada, unos meses después del nacimiento de ella me enteré que Seo Changbin había desaparecido, nunca supe nada de el, ni el por qué desapareció, solo se que me culpan por algo que no hice.
—No fue tu-
—Siempre fui la marioneta de mi papá, hago lo que el dice, actuó por lo que me dijeron y siempre ellos tendrán la razón, mi hermano me odia por que nunca lo defendí cuando lo llevaron al centro psiquiátrico, pero no lo necesité y nunca lo hice, cuando mi papá consiguió amante hice todo lo posible y traje algunos fallos que había cometido en el pasado para que pagara, no sabía que después lo asesinarian, sin embargo mi padre y Seo obligaron a un menor a practicar aborto... Y yo tengo el contrato —Confesó —Tengo una hija Hyunjin, y me culpo por no estar con ella los primero seis años de su vida, me odio por qué siempre fui la marioneta de mi papá y gracias a mi dos personas murieron aunque uno no haya Sido así, me odio por que tengo miedo de hacerle daño a mi propia hija... Y quiero estar contigo —Sollozo, solo quiero que todo esto pare...
—Innie, si estás tan cansado ¿Por qué no lo dejas?, tienes suficiente dinero para seguir adelante.
—Por que no se más nada, fui criado y educado para estar en dónde estoy, no se que más hacer yo... —Sollozo y abrazo a Hyunjin con fuerza.
—Jeongin, me tienes a mi, ahora debemos salir de esto juntos, ¿Ok? —Soltó para tomarlo de la mejilla —No estás solo.
—¿No estás molesto?
—No, de hecho si me sorprendió... Pero, me alegro que hayas tenido el valor de contarmelo, aunque chan ya me había dicho que Lia era hija tuya...
—¿Papá? —Investigó una pequeña quien se frotaba los ojos con sus dedos.
—Ven acá —pidió Jeongin. La niña rápidamente se colocó en medio de ambos y el Omega observó a Hyunjin —Gracias...
—Estare siempre para ti.
(...)
El sol brillaba con intensidad sobre el escenario al aire libre donde jeongin se preparaba para dar su conferencia. Antes de salir, observó a Hyunjin y a su pequeña hija jugando en la distancia. Una sonrisa se dibujó en su rostro mientras pensaba en su propia familia, oculta y protegida de los reflectores.
Cuando salió al escenario, los reporteros y las cámaras lo rodearon como abejas a la miel. Las preguntas llovieron sobre él, pero el Omega no se inmutó. Estaba acostumbrado a este escrutinio, a la presión de los medios. Respiró hondo y enfrentó la multitud.
—¿Tiene algo que ver con los cargos en su contra? —preguntó un periodista.
Jeongin mantuvo la calma. —No tengo nada que ver con esos cargos —declaró con firmeza. —Y si alguien está detrás de todo esto, lo encontraré
En medio de la multitud, su hermano gemelo, apareció de la nada. Gritó acusaciones, llamándolo una farsa y un hipócrita. Los flashes de las cámaras capturaron su rostro enojado. jeongin sabía que estaba resentido. Sabía lo que podría suceder.
Entonces, el gemelo soltó una bomba. —Jeongin si tuvo que ver con la muerte del anterior gerente — confesó —Y también esta ocultando a un infante.
La multitud quedó en silencio. Los reporteros se apresuraron a capturar cada palabra. Jeongin no se dejó intimidar. Miró a su hermano y dijo: —No presten atención a lo que dice el beta. Está medicado y confundido. Tengan paciencia. La verdad prevalecerá.
Los flashes continuaron, pero Jeongin se mantuvo firme. Sabía que la lucha apenas comenzaba. Debía proteger a su familia y limpiar su nombre. La conferencia continuó, pero en su mente, las piezas del rompecabezas se unían. ¿Quién estaba detrás de todo esto?.
(....)
Innie se encontraba en la imponente oficina de su padre, rodeado de muebles de caoba y retratos familiares. La tensión en el aire era palpable. Había llegado el momento de enfrentar a su progenitor y aclarar las sombras que lo habían perseguido durante tanto tiempo.
—Padre —comenzó Innie con voz firme, —sabes que no tengo nada que ver con las desapariciones. Pero tú... ¿tú estás involucrado?
El anciano Yang, con su mirada gélida, no mostró sorpresa. —¿Crees que soy capaz de algo así? —respondió con desdén. —No me subestimes, hijo.
Antes de que Innie pudiera replicar, una figura emergió de las sombras. Era su hermano gemelo, Yang, el eterno rival.
—Quiero verte sufrir — espetó. —Nunca te preocupaste por mí
Jeongin lo miró con tristeza. —No es cierto. Pero ahora debes hacerte cargo de tus acciones. ¿Qué sabes de las desapariciones? ¿Y qué ocultas?
El gemelo sonrió con malicia. —Tienes razón, Yo tuve que ver con la muerte del anterior gerente —confesó. —Y también con la desaparición de Seo.
El Omega cobrizo apretó los puños. —Padre, si no asumes la responsabilidad, publicaré el contrato de hace años. Irás a la cárcel, junto a Heeseung, quien puso la denuncia. Y tu volverás al psiquiatra, mientras Seo regresa a la tumba.
El anciano Yang pareció sorprendido por la audacia de su hijo Omega. —Nadie dirá nada— murmuró. —Podemos llegar a un acuerdo.
Innie soltó una risa amarga. —No estamos en negociación —declaró.
Antes de que pudiera continuar, su teléfono sonó. Era el hospital. Hyunjin había sido atropellado junto a la pequeña. El mundo se tambaleó, y las piezas del rompecabezas se movieron una vez más. ¿Cuando se había salido todo de control?
—Hyunjin, aguanta. No te dejaré solo en esto.
Jeongin apretó el volante con fuerza mientras su coche se abría paso por las calles congestionadas. El hospital estaba cerca, y la urgencia lo impulsaba. Hyunjin y la pequeña necesitaban ayuda, y él no podía fallarles.
En medio de la prisa, sacó su teléfono y marcó el número de Chan. La voz de su amigo sonó al otro lado de la línea.
—Chan, ¿dónde estás?"
—Estoy cerca de... —Pero antes de que Chan pudiera terminar su frase, Innie lo interrumpió.
—Ve al hospital. Hyunjin está allá. ¡Rápido! —La conexión se volvió borrosa. Chan no parecía entender bien. Innie frunció el ceño y trató de explicar con más claridad.
—¿Dónde estás? No escuché bien.
—Estoy en camino al hospital. ¡Hyunjin necesita ayuda!
Pero el silencio fue su única respuesta. Otro coche apareció de la nada, impactando contra el suyo. El mundo giró, y el metal crujía. El coche de jeongin se volcó, y todo se volvió caos.
El dolor punzante en su hombro lo dejó sin aliento. Sangre. Cristales rotos. El teléfono aún en su mano, pero Chan no respondía. ¿Había llegado el mensaje a tiempo? ¿Habría entendido?
Jeongin luchó por salir del coche volcado. El otro conductor estaba aturdido, pero ileso. Jeongin lo miró con rabia. ¿Por qué ahora? ¿Por qué justo cuando todo estaba en juego?
El hospital seguía cerca, pero ahora parecía inalcanzable. El sonido de las sirenas se mezclaba con el dolor en su cabeza. Hyunjin. La pequeña. No podía fallarles...
Jeongin se puso de pie, ignorando el dolor. Miró al cielo, como si buscara respuestas. Pero solo encontró nubes grises y el eco de su propia voz.
🥟.
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Babe, No Eres Omega | Hyunin [Omegavers]
FanfictionEn un mundo donde las dinámicas de poder entre alfas y omegas dominan la sociedad, Hwang Hyunjin, un alfa de 23 años, se encuentra en una encrucijada. Sus padres, obsesionados con la tradición, insisten en que encuentre un omega para mantener el lin...