UNA PARTE DE MI SIN TI // JENLISA // (JENLISA JENNIE+LISA BLACKPINK)

CAPÍTULO 8 EL DEPARTAMENTO DE DISEÑO

Durante las siguientes dos semanas, Lisa intenta hablar con Jennie yendo a buscarla a su casa pero nunca la encuentra, si la evade o no, ella no lo sabe. Esa mañana de vuelta de una ardua rutina de pierna, está a punto de meterse a bañar cuando Somi entra a su cuarto sosteniendo su móvil indicando que debe contestar.

—¿Señorita Lisa Manoban?

La chica asiente.

—¿Hola?

—Perdón, sí.

—La estamos llamando porque usted aplicó para nuestra vacante de diseñador gráfico, ¿es posible que se presente en la empresa mañana a las diez de la mañana?

—Sí señor.

Somi observa a su hermana asentir y negar al teléfono esperando por si necesita su ayuda para algo. A pesar de los años, Lisa sigue sin poder (o más bien querer) acostumbrarse al uso de su móvil; incluso mantiene el mismo fondo de pantalla que ha tenido desde el día cero: su foto de ella y Jennie en la que esta sonríe a la cámara mientras Lisa besa su mejilla. Lo que nadie sabe es que ella no ha querido cambiarla nunca por el simple hecho de que todavía ama a la bióloga.

—Hasta luego, muchas gracias.

—¿Quién era?

—Apliqué para un trabajo.

—¿Ah sí, y dónde?

Lisa se encoge de hombros retomando su tarea de meterse a bañar.

—¿Y haciendo qué?

—Diseño.

—Vale, ¿y qué usarás?

—¿U-usar?

—Sí, para ir.

—Pues ropa —de nuevo levanta los hombros.

Desnuda no va a ir, ¿por qué su hermana le pregunta eso?

—Hermana —suspira cansada—, me refiero a lo que usarás para ir a tu entrevista, debes vestir formal, ¿o pretendes irte vestida como normalmente vistes?

¿Y qué tiene de malo su ropa? La chica del café no ha salido de sus camisetas holgadas de bandas de rock y diseños medio góticos, aunque ha sumado a sus outfits algunas faldas prensadas, jerseys, camisetas de lino, medias largas, botas y... tenis, Lisa es team tenis por siempre. La chica alta no tiene un estilo definido, simplemente usa lo que quiere y la hace sentir cómoda, eso sí, no permite otra gama de color que no sea blanco o negro.

Al ver la mirada confundida de su hermana mayor, Somi deja escapar un suspiro de frustración poniéndose manos a la obra en el clóset.

—Métete a bañar y te ayudaré con eso, anda.

Lisa trata de disipar el pensamiento caótico que le está queriendo punzar los nervios al ver a su hermana desacomodar su ordenado armario esparciendo su ropa por su cama pulcramente tendida (una moneda podría rebotar en el centro).

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Jennie se pasea por su oficina en Axtro Corp. de un lado para el otro sin saber qué hacer, va por su tercer vaso de whisky y no se le ocurre nada para solucionar su problema.

—Maldita sea —apoya el vaso vacío sobre su escritorio. Ojea una vez más el montón de portafolios sobre su escritorio no dando con ninguno que sea de su agrado.

Wonyoung, su secretaria, entra en ese momento acompañada de un joven alto y tez tan blanca como la de la chica que se encuentra ahora mismo halándose el cabello en señal de desesperación profunda.