El motivo de la reunión ese día en casa de Jennie y Lisa, es para poner los adornos navideños, ya que será en su casa donde se llevará a cabo la cena de navidad y fin de año del grupo de amigos, además de que Karla vendrá con sus padres a pasar las festividades.
Jennie fue la persona más feliz del mundo al ir con Lisa a hacer esas compras, pues parecía una pequeña niña emocionándose con cada nuevo adorno que encontraban. Desde que inició el mes que usa un gorro de navidad todo el tiempo que le es posible, adorable. Ahora se encuentran armando el enorme árbol de navidad que no pudo resistirse en comprar por la cara de felicidad de su novia al verlo tan blanco como los que de seguro habría en el polo norte cubiertos de nieve.
—¡Nini, Rosie!
Lisa viene corriendo a la cocina donde su prometida y Rosé se encuentran preparando el almuerzo, su cara es de tristeza mezclada con enojo.
—¿Qué pasa mi amor?
—Jisoo me está molestando —acusa con un puchero—, dice que-que Santa Claus no existe, ¿verdad que sí existe?
Rosé ríe con ternura yendo a la sala a reprender a su malvada amiga.
—Claro que sí, cielo, no le hagas caso a esa estúpida —besa sus labios con amor—. Es una envidiosa porque Santa no le traerá nada este año por portarse mal.
—Santa no le trae regalos a los que se portan mal —sonríe la pelinegra orgullosa—, les trae carbón.
—¿Alguna vez te trajo carbón a ti?
—Nunca, yo siempre me porto bien.
—Es que eres un angelito precioso.
—No soy —ríe—. Soy una persona.
—Vale, mi persona favorita, ¿me ayudas a sentarme aquí?
Lisa la carga para ponerla sobre el desayunador inmediatamente abrazándose a su cintura. Le gusta esa posición, pues sus estaturas se igualan a la perfección.
—¿Qué le pediste a Santa este año?
—Es un secreto. Ya escribí mi carta y la pondré en los calcetines de la ventana para el día de velas cuando venga por ella.
—¿De niña te traía regalos? —pica con curiosidad.
Lisa asiente sonriente.
—No me traía lo que le pedía, pero sí me traía algo a mí y a Somi. ¡Tenemos que dejar leche y galletas para él ese día! —se le ocurre de pronto dando saltitos en su lugar—. A Santa le gustan mis galletas navideñas.
—¿A quién no?, son deliciosas.
Lisa reclama los labios de Jennie en un beso cálido y lleno de gratitud que la otra puede sentir por lo delicado de este. Una navidad con el amor de su vida después de ocho años y con nuevos integrantes en su familia, está más que feliz, además porque después de tanto sufrimiento en el pasado, ahora por fin es feliz.
—Te amo mucho Jennie.
—Yo también te amo mucho mi cielo lindo, ¿quieres que te ayude a armar el arbolito?
—¡Sí!
Flashback.
Su primera navidad con mamá Chittip fue algo con lo que siempre soñó estando en el orfanato. La señora Chittip pone los últimos adornos al árbol de navidad sosteniendo la gran estrella brillante en sus manos. Lisa observa embelesada cómo brillan las luces cambiantes de color en el más hermoso de los árboles que ha visto nunca, todo blanco como los pinos en el polo norte donde trabaja Santa Claus.
ESTÁS LEYENDO
UNA PARTE DE MI SIN TI // JENLISA // (JENLISA JENNIE+LISA BLACKPINK)
RomanceMi nueva versión de "una parte de mi alma", habla de cuando perdemos precisamente ese pedacito de nuestra alma y todo lo que nos queda es tal vez nada, solo los recuerdos; se trata de lo que queda de nosotros cuando perdemos a quien amamos, de esa h...