UNA PARTE DE MI SIN TI // JENLISA // (JENLISA JENNIE+LISA BLACKPINK)

CAPÍTULO 16 UNA JUNTA EXTRAORDINARIA

Somi ayuda a su hermana a darse los últimos retoques junto al enorme espejo de la sala acomodando su peinado. Luego de mucho insistir, Rosé logró que Lisa eligiera un considerablemente corto y neutral vestido negro de tela lisa para usar con panty medias del color de su piel; en sus pies un par de tacones que fácil le aumentan diez o más centímetros de estatura, el cabello recogido en un moño con algunos mechones cayendo en su cara y el enorme abrigo que no puede faltarle al elegante outfit, este de color azul.

—Vas a matar a todos en esa oficina apenas te vean entrar —comenta Somi llenando la memoria de su teléfono con fotos de Lisa.

—¡¿Matar?! Yo no... Jennie, es una-una reunión, yo...

—Tesoro, no es literal, es que estás muy hermosa —tranquiliza Rosé—. Ahora vámonos, que Jennie me pidió que te lleve yo misma.

—¿Ella-ella no vendrá?

—Jennie por poco y no durmió en su oficina anoche, tuve que ir por ella en la madrugada porque sabía que no había salido de su oficina en todo el día y así fue, se quedó en mi casa y salió muy temprano esta mañana, apenas y durmió.

Somi acompaña a las chicas hacia Hillmorie en un silencio que Lisa aprovecha para repasar mentalmente todo lo que hará y dirá en esa junta. Ese día es muy importante para Jennie y ella no le fallará con su torpeza, saldrá y se pondrá frente a toda esa gente importante y la hará sentir orgullosa.

—¿Estás nerviosa? —pregunta Rosé viéndola amasar sin piedad el bote de slime que lleva en las manos.

Lisa asiente.

—Lo harás bien, Jennie me dijo que con tu excelente memoria te aprendiste muy rápido y fácil todo lo que ella preparó, que eres muy inteligente.

—Mi hermana es la mejor, oye —toca su hombro para que la voltee a ver—, solo imagina que estás en una de las exposiciones de tus obras en la universidad y que toda esa gente solo son turistas que vienen a verte, tú más que nadie sabes de lo que tratan esas obras, así que siéntete segura de hablarles y con muchísima propiedad. Son solo un montón de ancianos decrépitos a punto de estirar la pata, no es la gran cosa.

—I-irán los papás de Jennie.

—Por eso —sonríe malvada—, razón de más para que saques pecho y te luzcas y les calles la boca.

Su hermana y Rosé la acompañan hasta el ascensor deseándole éxitos. Dentro del encerrado espacio toma varias respiraciones y aprovecha los espejos para acomodar lo que cree que está desacomodado; las manos le sudan, los pies le tiemblan ya no sabe si de los nervios o por lo incómodos que son sus tacones, y su abrigo le empieza a hacer calor.

El "tin" agudo y la voz robot le indican que ha llegado a su piso, la oficina de presidencia. Todo luce perturbadoramente tranquilo, ni siquiera Wonyoung la secretaria se encuentra en su puesto, por lo que no le queda de otra que tocar la puerta.

Dentro se escuchan algunas voces antes de sentir acercarse el ya conocido sonido de los tacones de Jennie, quien abre su puerta teniendo que levantar un poco de más la cabeza para enfocar toda la figura increíble que tiene delante.

Ambas chicas tienen que retroceder un paso para fijarse en lo despampanantes que están, ambos corazones corren a abrazarse dejando dos cuerpos estáticos atrás que solo pueden observarse con adoración mientras tragan entero la saliva en sus bocas deseosas por salir corriendo a encontrarse también.

—¡Vaya, vaya! Si no convencemos hoy con el tremendo discurso que tenemos preparado, tendremos a este par de bellezas como as bajo la manga —alaba Yeonjun apartando a su prima de la puerta—. Lisa Manoban —ofrece su mano que esta acepta con una sonrisa tímida—, te ves deslumbrante el día de hoy.