No sé cuánto tiempo he estado encerrada en este escondite subterráneo. Lo que sí sé es que ha sido un verdadero infierno.
Después de que Choso me atacó son su sangre penetrante, perdí la consciencia por el fuerte dolor. Cuando desperté estaba en el suelo de una habitación húmeda y oscura.
Sigo estando aquí, sin tener noción del tiempo. Desperté sin mi móvil, con una molestia en el hombro que parece mediamente tratado y envuelto en un par de vendas.
Supongo que no ha de ser mucho el tiempo que llevo aquí, honestamente no lo sé.
Tengo sed y el estómago me ruge de hambre cada tanto, pero pequeñas pisadas aquí y allá que supongo que son de ratas y ese gotear contra el suelo que ocurre entre segundos me tienen irritada y enferma.
Estoy débil y no tengo energías para intentar transportarme fuera de aquí, de hecho, me siento completamente incapaz de usar mi energía maldita en absoluto.
Escucho pisadas grandes y fuertes, oh, son un par.
La puerta de abre con un chirrido que trilla en mis oídos, apenas veo al frente con un ojo apretado, mi vista se ha adaptado tanto a la oscuridad que la luz repentina que hay del otro lado de la puerta lastima mis ojos.
Las pisadas continúan dentro de la asquerosa y húmeda habitación, pero aún soy incapaz de reconocer de qué par se trata.
-Ugh-siseo de dolor cuando soy sujetada por debajo de mis dos hombros y mis brazos. Estoy demasiado débil como para caminar siquiera, apenas siento los pies andar sobre el suelo.
Ya fuera, mis ojos se toman un momento para adaptarse a la luz. No sé cuánto nos demoramos, pero en un momento estoy otra vez en la "sala". Choso y Hanami me llevan arrastrada a Kenjaku, Mahito y Jogo. Me echan al suelo sobre el hombro que Choso atacó y mi grito de dolor vuelve a inundar el lugar.
Jadeo brevemente de dolor, sintiendo mareos y fuertes ganas de vomitar. No quiero, pero sí es posible que vuelva a desmayarme si el dolor sigue así de intenso.
Mientras trato de controlar mis respiraciones escucho una risa de Mahito y un "Tsk, tsk, tsk" de desaprobación de Kenjaku.
Me relamo los resecos labios y paso saliva, tengo que ser fuerte.
-T/n, T/n, ¿por qué escoges el camino difícil?-pregunta Kenjaku con una fingida expresión preocupada sobre el rostro.
>>Lo único que queremos es charlar contigo~ y conocer un poco más sobre ti.
No sé qué me enfurece más, que este usando el cuerpo de otro de mis husbandos favoritos o toda su mentira. Igualmente es curioso, no contaba con Mahito y su lengua larga, rayos... Han estado siguiéndonos a Satoru y a mí, tanto como a los otros.
Mmm... tengo que pensar en algo, rápido, pero el dolor en mi cuerpo lo hace muy difícil... siento mis pensamientos nublados por ideas mezcladas... y resulta que no paro de tener imágenes cortas sobre mi hogar.
No sé qué significa eso...
-Agua.-digo, mi voz suena apagada mi garganta duele nada más por haber hablado.
Tal vez estuve encerrada por unos dos días máximo. Vaya que necesitan información, están muy desesperados si me dejaron encerrada tanto tiempo después del ataque de Choso y, ¿creen que eso me va a hacer hablar?
-Mmm, ¿agua? ¿No quieres comida también? Podemos hacer un trato, si quieres comer y beber primero tendrás que hablar- Mahito ríe tras escuchar a Kenjaku.
Hmp, desgraciado. Cuando te escuche gritar como cobarde me voy a reír... otra vez.
-Hmp- río entre dientes y trato de sentarme sobre el suelo, sin importar que el movimiento me hace doler el cuerpo-, tú decides si te soy más útil viva o muerta.
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Escape a la Realidad (Satoru x Lectora)
Fanfiction-¿Y bien? ¿Puedo tomar mi mano de vuelta?-pregunta despreocupado con un tono irónico en su voz. -Es cálida...-murmuro muy bajito. No puedo creerlo. -¿Uh?-emite un sonido a modo de pregunta. Su mano es cálida, ¿por qué? Usualmente en los sueños no o...