Parte 15. GRAN PREMIO DE ESPAÑA

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Camino al Avión privado de Lecrec

Habíamos terminado de empacar, creo que ya llevaba todas mis cosas. Y hasta cierto punto estaba empezando a creer que la historia con Charles iba a empezar a ser trágica por culpa de mi familia. Pero preferí cambiar mis pensamientos cuando vi a Lecrec sonreírme tan lindo y dejándome un beso en la frente.

- ¿Vamos, Bonita?

- Si, claro

Tocaron a la puerta. Así que me apresure a abrir en lo que Charlie sacaba las maletas de la recámara.

- Joris, ya vamos. Ya sabemos que es un poco tarde, pero fue mi culpa

- Lo sé, es cosas de mujeres ajaja. ¿Y Charlie? - menciono asomando un poco la cabeza por la puerta

- Viene ya, con el equipaje

- Ya pensante en lo que hablamos anoche. Se que la decisión es difícil, pero es más difícil para mí, porque es mi mejor amigo.

- Podemos irnos. - menciono por detrás de mi Charlie.

- Claro cariño.

El camino hacia el hangar había sido algo incomodo, porque hubo muchos momentos silenciosos. Y cuando Joris trataba de cortar la tensión Marc parecía estar enojado con él. Lo bueno que condujo rápido para que no sufriéramos más los tres.

Llegamos al hangar, Arthur ya estaba esperando por nosotros junto con Carlos y Lando, ¿en serio Carlos? Dios mátame, aviéntame o ahógame antes de soportar a este de nuevo. Joris prefiero quedarse atrás, antes de saludar a Carlos. Sin en cambio Charlie se adelantó saludando a los chicos de un abrazo.

- ¿Ni siquiera le hablas? - le dije a Joris

- No, me cae tan mal - decía revisando su celular

- ¿Y ahora qué? No saludaras al par de más o dime que hago, porque aparte de todo Charlie parece molesto, pero no sé si contigo o conmigo.

- Adelántate distráelos sirve que no saludo a Carlos - decía sin apartar la vista de su celular

- Ah claro la tonta por delante

Me acerque a ellos, saludando a Arthur y a Lando, pero solo diciendo Hola a Carlos.

- Charlie - dije tomándolo de la mano. Pero él me soltó para sacar su celular.

- Dime

Ok, el problema era conmigo. Ya que desde que lo conozco jamás había rechazado mi mano. Y menos delante de alguien. Sentí la mirada del trio que estaba con nosotros, y lo único que pude hacer fue mirar a Joris desde lejos, mientras hablaba con alguien por teléfono.

- Charlie, ven por favor - lo jale, haciéndolo a un lado para que las tres personas cercanas no pudieran escucharnos - ¿Qué te pasa?

- ¿con que o qué? - decía mirando el celular

Si algo me molesta es que quiera evitar una conversación y dos, que le preste más atención al celular que a mí, que no llevábamos ni 24 horas siendo novios y al parecer ya íbamos por nuestra primera discusión y no sabía por que era. Así que le tape la pantalla del celular con mi mano. Y él me miro ¿furioso? O sea que es más importante su maldito celular, y preferí retirárselo de las manos. Haciendo que Charlie alzara los hombros, y refunfuñara.

¿así es como se molesta un Charles Lecrec?

- Puedes prestarme 5 minutos de tu atención, y no hacer berrinche mirando el celular.

"Un viaje ¿soñado?"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora