Black Dawn [+21]

CAP. 22 Beth

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|CAPÍTULO 22|

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...Beth...

AVERY BLACK

Me remuevo en la cama y escucho un gruñido.

Una pequeña sonrisa se forma en mis labios, él se remueve envolviendo sus brazos a mi alrededor, de un jalón me coloca sobre su cuerpo y abro mis ojos colocando mi barbilla sobre mis manos cruzados que había colocado en su torso.

Sus ojos siguen cerrados y su rostro aún sereno, nada en comparación con lo bestia que fue la noche anterior. Vuelvo a cerrar mis ojos y a caer en un sueño profundo con el sonido tranquilizador de los lados de su corazón.

Sus latidos son tranquilos, y eso me encanta. Me tranquiliza haciéndome dormir nuevamente.

Mi cuerpo no aguanta estar despierta, estoy demasiado agotada. Hemos follado peor que conejos y mi cuerpo está totalmente debilitado. Él ha consumido hasta lo último de mí.

No sé cuánto tiempo pasa, solamente sé que cuando me giro para poder sentirlo su lado de la cama está vacío. Abro perezosamente los ojos, busco mi móvil en la mesita de noche pero no hay nada...<<Cierto que he cambiado de habitación>>...refriego mis ojos y bostezo, luego me siento observando el desastre comunal que hemos hecho anoche.

La ropa de él aún sigue por toda la habitación, al igual que la mía. Una pequeña sonrisa se forma en mis labios, pero la vuelvo a borrar recordando la razón de porque la habitación está así.

Los recuerdos de él ingresando con ella en Pub invaden mi mente, ¿He dejado que me vuelva a follar luego de que haya follado con ella en la habitación que compartíamos?.

Joder.

—Que estúpida eres, Avery—me regaño a mí misma.

Escucho mi móvil sonar.

Recorro la habitación con la mirada en busca de mi bolso, está sobre uno de los sofá ¿Cómo llegó allí?. Trato de ponerme de pie, pero vuelvo a caer en la cama quejándome de dolor. Me ha destruido el coño. ¡Maldito, bastardo!.

¡¿Cómo pude dejar que me hiciera esto?!, ¡Tiene un monstruo entre sus piernas!.

Mi móvil deja de sonar, pero unos segundos después empieza a sonar nuevamente.

Como puedo me coloco de pie. Aspiro con fuerza y con mis piernas temblorosas, doy pasos cortos pero seguros hasta llegar a mi móvil. Es Issy.

Tengo más de treinta llamadas perdidas de todos, ¿Qué ha pasado?.

Atiendo rápido.

—Hola—suspiro.

—¡Joder, maldita perra, hasta que al fin te has dignado en contestar el maldito móvil! —grita furiosa, alejo el móvil de mi oreja en cuanto escucho la primer palabra.

Hago una mueca y noto sobre la mesita comida junto a una botella de zumo de naranja.

—¿Qué pasó?

—¡¿Dónde carajos estás?! —escucho gruñir furioso a Jhony.

—En mi habitación, ¿Dónde más?.

—¡No estoy para tus malditas bromas, Avery! ¡¿Dónde coños estas?!

Ruedo mis ojos...<<Jhony siendo Jhony>>...me acerco a la mesita y agarro una media luna.