Capítulo 24 | Recuerdos que se desvanecen

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Narra Eliette

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Narra Eliette

Ver como la niebla desaparecía por completo de todos los rincones que rodeaban el reino mientras volaba en Ayris junto a Reed sobre Jadiel y Arawn, el leónido, me hizo sentir una gran emoción y alivio en el pecho que apenas podía contenerme. Jamás creí que viviría para ver este momento, pero está pasando, es real. Bajé la mirada a Ayris, recordando todo lo que pasamos y que, si bien ya me he disculpado un millar de veces, aún no creía que fuera suficiente.

Bajamos del cielo hasta el nuevo reino que los dragones ayudaron a construir, es impresionante con en tan poco tiempo ya se ha avanzado un montón. Los dragones de tierra crean la base de las casas y los terrenos, los de cueva les dan forma, los de fuego ayudan a cocinar los materiales para que las casas se sostengas, los de naturaleza adornan y dan más material. Cada uno tiene su parte en esto y ver como los dragones y humanos trabajan junto me llena de satisfacción. Pero lo mejor de todo es la celebración que inició luego de mi regreso y la coronación de Reed que a pesar de haber sido ayer, sigue hoy y no se ven indicios de que fuera a parar pronto. No importa. Escuchar la música y ver las danzas de los humanos me divierte.

Ayris camina por las nuevas calles contraídas, mientras las personas y dragones nos saludaban y algunos se inclinaban. Fue sorprendente saber que algunos dragones encontraron a sus vínculos gracias a esta unión y me hace pensar que no lo hubieran hecho si esto no hubiera pasado. Kherr se ve muy feliz al lado de su nueva compañera, tampoco pensaba que podría ver esto algún día, con lo serio y descuidado que es Kherr con los niños, no me esperaba ver que sea tan delicado y suave con ella.

-"Debo admitir que me había equivocado" -escuché a Ayris-. "Debí hacerte caso desde el comienzo y no obligarte a negar lo que eres."

-Tenías miedo porque te preocupabas por mí y por el reino, a pesar de todo lo hiciste con buenas intenciones al igual que yo al ocultarte cosas y mentirte por proteger a otros animales... Debí ser honesta contigo.

-"Bueno... si lo hubieras hecho, de seguro que habría incinerado a Reed desde el inicio, así que supongo que estuvo bien que no me lo dijeras o no podríamos ver esto hoy."

-Sí... me sorprendió mucho ver que venían todos con él.

-"Cuando no te encontramos en ningún lado, él supo de inmediato lo que te pudo haber pasado, ¿cómo ignorar eso? Más me importaba salvarte que cualquier enfado u odio hacia los humanos."

-Oh, Ayris -la abracé sintiendo las ganas de llorar amenazando con salir.

Sonreí agradecida por sus palabras, pero decidí bajar al llegar en donde todos los humanos estaban bailando, los miré un segundo antes de notar por el rabillo del ojo una mano tendida hacia mí.

-¿Me concedes una pieza, mi reina? -Reed me sonríe cuando apoyé la mano sobre la suya.

-Por supuesto.

LA DAMA DE LOS DRAGONESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora