This old dog

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Canción recomendada a escuchar: This old dog - Mac Demarco

Geto seguía con su rutina monótona. Exorcizar, absorber, exorcizar y absorber. Meses, semanas y días se habían convertido en una repetición interminable. "¿Tendrá esto algún fin?", se preguntaba a sí mismo mientras caminaba lentamente hacia la estación de tren, donde tomaría el siguiente tren hacia su siguiente misión.

Mientras esperaba la llegada del tren, su atención se centró en las personas que iban y venían. Observaba detenidamente a cada persona que pasaba frente a él. Su mirada se detuvo en un grupo de chicos de preparatoria, probablemente de su misma edad. Notó cómo reían y charlaban animadamente, aparentemente despreocupados por los problemas que él enfrentaba diariamente.

Una mezcla de envidia y nostalgia invadió su mente mientras recordaba los días en los que Shoko, Satoru y él se divertían en sus primeros años de la academia, trabajando juntos en misiones. Recordó cómo competían para ver quién podía exorcizar más maldiciones o cómo se escapaban de clases para ir al arcade. La expresión en el rostro del Maestro Yaga al descubrir sus travesuras al día siguiente era un deleite para los jóvenes.

Pero ahora las cosas habían cambiado. Era el único que continuaba realizando misiones. Shoko, siendo tan importante por su técnica inversa, no podía arriesgarse en misiones peligrosas. Y Satoru, bueno, se había vuelto el más fuerte, ya no necesitaba tenerlo a su lado.

Geto se sentía un tanto excluido y dejado de lado. Extrañaba la amistad y la diversión que compartían los tres. A pesar de su éxito y habilidades, había una sensación de vacío en su corazón. En aquellos tiempos eran ellos tres contra el mundo, pero ahora él estaba solo. Y estaba perdiendo la batalla.

Un zumbido en su celular lo hizo volver a la realidad, sacándolo de sus pensamientos. Sacó el teléfono de su bolsillo y levantó la tapa para leer el mensaje de su asistente. Le decía que no se subiera todavía al próximo tren, ya que tenía que esperar a su compañero de misión. Suguru frunció el ceño ante esta noticia. ¿Un compañero? Habían pasado meses desde la última vez que trabajó con alguien más. Además, ¿Quién podría ser?

Dudaba que fuera Shoko o Satoru. Escuchó unos pasos acercándose y levantó la mirada. -"¿Geto?"- llamó una voz dulce. Suguru parpadeó varias veces, sorprendido por ver a la persona que menos esperaba. -"¿Hebihada?"- murmuró, sin poder creerlo.

.....

-"¿Tú... serás mi compañera para la misión?"- preguntó el azabache, observando a la chica con ceño fruncido. Ella respondió con un tono de voz bajo -"Suenas decepcionado..."- Geto captó rápidamente cómo sonó su voz al realizar la pregunta y levantó las manos en señal de negación. -"No, no, no. No me malentiendas, no quise que sonará así"- Rió nerviosamente, tratando de explicarse -"Solo me sorprendió que fueras tú, digo, nunca he visto que unieran a personas de distintos años para una misión, así que por eso..."-

-"Bueno..."- comenzó ella, inventando una excusa mientras se rascaba la nuca nerviosamente -"Me imagino que es porque últimamente ha habido demasiadas maldiciones poderosas..."- La castaña soltó una risa al recordar cómo había modificado los documentos para poder hacer esta misión juntos.

-"¿Pasa algo?"- preguntó Geto al notar cómo la chica se rió sola. -"¿Eh?, ah... no, nada, no te preocupes"- respondió ella con inquietud. Se acercó más a él hasta quedar a su lado y preguntó, con curiosidad genuina. -"¿De qué es la misión? Me llamaron repentinamente"- Era una mentira, no había leído los documentos de la misión.

Geto se aclaró la garganta -"Debemos realizar una misión de reconocimiento en una vecindad abandonada. Al parecer, unos inversionistas están interesados en comprar el lugar, pero recientemente ha adquirido mala fama debido a rumores de personas desaparecidas en el área"- se encogió los hombros -"Ya sabes, lo usual"-

URÓBORO || Geto SuguruDonde viven las historias. Descúbrelo ahora