Los estudiantes de segundo año se dirigían al campo de entrenamiento para llevar a cabo los exámenes necesarios que actualizarían las listas de poder, todo a raíz de la incorporación de la nueva estudiante, Hebihada.
-"Hebihada-chan"- llamó el castaño -"Siento muy poca energía maldita en ti, ¿Por qué?"- Mikazuki se sorprendió ante la observación. Sabía que el contrato con Tengen le había aumentado la energía, pero no al punto de ser fácilmente detectable. -"Bueno, ¿Qué te diré?"- rió - "Quizá me falte entrenar más mi energía, pero la que tengo puedo controlarla perfectamente"-
Los chicos no pudieron ignorar los pequeños colmillos que sobresalían de la dentadura de la chica, junto con sus rasgos faciales que mostraban una mezcla de influencia occidental y japonesa. Se preguntaban si era mestiza, pero por respeto decidieron guardar silencio.
- "¿En serio?"- el castaño parpadeó con curiosidad.
- "Bueno"- comenzó a hablar el rubio - "Estos exámenes suelen ser rápidos. Te enfrentarás a cada uno de los estudiantes de segundo y tercer grado. Los de primero no suelen participar, acaban de ingresar a la escuela después de todo"- Nanami pausó un momento y dirigió su mirada a Hebihada, sintiendo curiosidad por las habilidades de la recién llegada -"No entiendo estas listas, todos sabemos que Gojo está por encima de todos"-
-"¡No todos!"- interrumpió Haibara -"Geto-san lo venció en combate físico. Hebihada-chan, te sorprenderás de las habilidades de Geto-san"- dijo emocionado el chico, dejando claro que Haibara era el fanboy número uno de Geto.
Hebihada solo rió, aunque su mente estaba en otra parte. Le inquietaba el hecho de que Suguru y Gojo actuarán como si no la conocieran cuando llegó a la escuela. Esperaba que todo fuera simplemente resultado de su sobre-pensamiento. Sin embargo, ya se encontraban en el área de entrenamiento cuando menos lo esperó.
En las gradas, los alumnos de tercer año y su maestro, Masamachi Yaga, esperaban con expectación la llegada de los estudiantes de segundo. Una vez que estos últimos llegaron, el maestro Yaga se acercó rápidamente a la nueva estudiante.
-"Soy el maestro Yaga Masamachi. Es un placer dar la bienvenida a una nueva hechicera"- dijo el hombre con cortesía.
- "Hebihada Mikazuki, el placer es mío" - respondió la chica.
-"¿Podemos terminar con esto de una vez? Algunos tenemos cosas que hacer"- Expresó un albino, irritado ya que no veía el sentido a estos exámenes, dado que todos sabían que él estaría en la cima.
Haibara, curioso, preguntó -"Leiri-san, ¿también participarás?- Leiri negó -"Nah, yo solo vengo por si alguien se lastima"- dijo mientras se acomodaba en su asiento. El maestro Yaga, centrándose en lo más importante, preguntó a Hebihada -"Bien, Hebihada, vayamos a lo más importante. ¿Cuál es tu técnica maldita?"-
La respuesta de Hebihada sorprendió a todos -"No tengo una técnica"- dijo sin titubear. Todas las miradas se dirigieron hacia ella, incluso Geto, que estaba más alejado del resto, decidió acercarse para escuchar más. ¿Hebihada no tenía una técnica?
-"¡Oh vamos!, debes estarme jodiendo..."- Gojo se enojó más con esa respuesta -"¿Estás diciendo que ni siquiera tienes una técnica?, deberías regresarte a Kioto, no queremos cargas aquí"- sonrió burlón -"Podrías llevarte bien con Utahime, ambas son unas debiluchas"-
-"Satoru, cállate"- exclamó Yaga con enojo -"Empecemos con esto, no pasaste la prueba de energía maldita ni la de técnica, solo quedaría la prueba física"- Gojo soltó una carcajada y Leiri le dió un codazo para que se callará.
-"Con que sueles pelear, ¿a puño limpio o usas armas malditas?"- Nanami estaba intrigado por el modo de combate de la chica. -"Cualquiera de las dos se me da bien"- Hebihada se encogió de hombros, realmente no le importaba con qué sería el entrenamiento, ambas opciones se le daban perfectamente.
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URÓBORO || Geto Suguru
FanficSolo existía una persona capaz de viajar entre universos y realidades: Hebihada Mikazuki, una Chamana de grado especial. Su único objetivo era salvar a Suguru Geto del camino que había tomado. Se le había concedido una última oportunidad, ¿Será capa...