Capítulo 12

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La Dama♤

Céline

Arreglo las cosas en la habitación, le pedí a mi hermano que se llevara a los pequeños. Voy al armario saco un conjunto negro de lencería la parte de arriba solo cubre mis pezones, la parte de abajo deja todo a la vista, sonrió al ver con que lo completare.

Es un collar de cuero, de este cuelgan cadenas que quedan sobre mis pechos, la parte de abajo es un cinturón de el mismo materias las cadenas caen hacia mis caderas.

Dejo mi cabello suelto y aplico labial rojo busco las botas altas negras y me las coloco.

Dejo los látigos de Elian en orden sobre la cama, le envió un mensaje, no tardó en escuchar como azota la puerta, y abre la de nuestra habitación.

- ¿que pasa?, ¿te sientes mal? -observa todo.

Tiene el cabello suelto, la corbata está floja, los primero botones de su camisa abiertos, la imagen es tan sexi.

- estaría mejor si no peleas con migo.

Niega y se resiste queriendo retirarse, no me ha visto estoy entre las sombras, salgo de las sombras y traga grueso, cuando me ve.

- ni lo pienses - dice queriendo salir.

Tomo su mano y lo jalo -no solo lo pienso - digo inocente.

- no lo voy hacer - trata de no verme. Beso su cuello, suspira pesado.

Paso mi lengua hasta llegar al lóbulo de su oreja - por favor -esas palabras, doblegan a la bestia que tengo frente a mi, toma mi cintura posesivo.

- detente - su voz es ronca.

- por favor -niega.

Beso sus labios, no me rechaza el beso es más, coloca una mano en en mi cabello para profundizar el beso, suelto un gemido y eso hace que pierda el control, se aleja y me observa en su mirada solo veo deseo.

Se quita la corbata, muerdo mi labio. Se acerca y lo libera con su dedo -te voy a follar duro, para que recuerdes que solo eres mía Muñeca - susurra en mi oído. Le ayudo con la camisa mientras dejo besos, esta jugando con mi paciencia, el no es así de lento pero esa es su manera de castigarme.

Me gira y me lleva a la pared más cercana mi mejilla toca el frío jadeo cuando siento su erección rozarse besa mi cuello mientras juega con las cadenas que cuelgan en mis caderas.

- me gusta - dice mientras toca el borde de mis senos.

- lo escogí para ti -gruñe y amasa mis nalgas sin ningún pudor.

- esto también me encanta, tu culo es perfecto - recuesto mi frente sobre la pared.

Mueve su mano hasta que la siento sobre mi coño, su dedo juega con la tela - ¿lo quieres?.

- lo deseo -gimo cuando aparta la tela y mete un dedo.

- ¿que deseas?.

Me agarró a su brazo -te deseo a ti, deseo que me folles - chupa la piel de mi hombro.

- ¿vas a cumplir mis deseos más oscuros Muñeca?.

- si, si cariño -siento un segundo dedo. Elian sabe como complacer a una mujer, sabe como tocar mi coño, saca los dedos y los lleva a mi boca. Chupo sus dedos imaginando que es su miembro.

Me gira y me ve a los ojos mientras lo hago, libera uno de mis senos y se lo lleva a la boca, abro la boca liberando sus dedos, le da atención al otro.

Lleva su mano de vuelta a mi sexo, acaricia ese pequeño botón con su dedo pulgar, gruñe cuando jalo su cabello.

Empujo sus hombros pidiendo una sola cosa, sonríe, me pegó a la pared, se retira y va a nuestro armario regresa trae unas cadenas gruesas con unas muñequeras de cuero en la pared ya hay un artefacto preparado para enganchar las cadenas.

Una Melodía Mortal (+21)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora