Adenium: Jardín Secreto (Kookmin)

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En este capítulo habrán escenas de índole sexual, si no es de su agrado no lo lea ni deje comentarios innecesarios

La tela fresca de la ropa de cama deleita gratamente el cuerpo exhausto e indefenso, y todo lo que el exhausto omega es capaz de hacer es conciliar un breve sueño. En algún lugar al borde de una conciencia aún sobria, se escucha un susurro tranquilizador. Calma y tan necesaria, justo al lado de tu oreja, a tus espaldas. El Omega intercepta la mano inerte de otra persona en su cadera, pero es inmediatamente rechazado cuando descuidadamente la arrojan hacia atrás y la encierran en una especie de trampa. Alfa, el alfa, le afecta de forma demasiado extraña o simplemente es demasiado inusual para él. Jimin casi se queja, tampoco hay forma de abrir los ojos, todo su cuerpo es como una masa sólida de plastilina a partir de la cual puedes moldear cualquier cosa. "Detente..." balbucea al borde de lo audible y se estremece bruscamente, arqueando la parte baja de la espalda y apoyando la parte posterior de la cabeza contra la curva del cuello del alfa. La respiración pesada de ambos y el interior borroso de la habitación. Jimin parece estar en agonía, está temblando, volviéndose del revés por la sed inquieta y, al mismo tiempo, insoportablemente avergonzado, aterrador y catastróficamente intoxicante. El Omega se expone abiertamente y gime roncamente cuando el alfa vuelve a entrar en él, temblando por la plenitud y la palma caliente de la parte inferior de su abdomen. Demasiado. Todo esto es demasiado. Jimin pensó que eran sólo conversaciones de pervertidos anormales, pero ahora siente con su propia piel toda la catástrofe del calor. Desastres para él, porque todo lo que hacía era inusual para él. Es inusual exponerse a un alfa con tal necesidad, exigirle cuando el propio alfa parece haberse calmado. No es habitual arrancarle del sueño y frotarse, sacudirse e incinerarse con una mirada suplicante, mordiéndose el labio. 

Jungkook está realmente cansado, pero el olor a vainilla lo marea hasta el punto de dejarlo ciego. Y ahora, cuando el omega parece haberse quedado dormido exhausto, realmente no puede dormir, sintiendo el cuerpo caliente frente a él con todos sus receptores acalorados. Es bueno que Park, debido a su terquedad, haya logrado tomar las pastillas, lo que significa que debería ser dado de alta al día siguiente. Jungkook tuvo que esforzarse mucho para evitar que Yoongi viniera a él el primer día. "Un Omega en celo es una completa pesadilla", gruñe Jeon en su oído y cierra los ojos por la sensación de humedad y paredes estrechas dentro de Park. - Loco, ¿Cómo me dices que pare? Jimin no lo sabe, simplemente se da por vencido. Se aferra a la piel de sus antebrazos con sus uñas cortas y empuja hacia sus caderas, aferrándose a la cabecera de la cama con la otra mano, ardiendo por completo. De qué tipo de ropa interior estamos hablando y del frescor salvador, sin ninguna idea particular. Jeon empuja al omega en el hombro y se inclina encima, presionando piel con piel, llevándolo a un ataque de éxtasis sordo, ahogándolo en la almohada y apretando la piel de sus muslos hasta que se pone roja. El Omega casi grita, murmura tonterías mezcladas con peticiones de que se detenga, pero esto actúa en progresión inversa. Para Jungkook, esas sensaciones de ardor también son nuevas, no ha probado omegas en celo y, sinceramente, a veces le repugnaban los olores fuertes, incluso es bueno que Junki siempre estuviera lejos de él en esos días. Pero Jimin es diferente. 

Algo especial, alucinante, y el alfa no permitió que nadie se hiciera esto, lo que este imbécil descarado ahora puede permitirse hacer. El olor y el brillo curioso de los estanques marrones provocan calambres en la parte inferior del abdomen y el alfa interior se vuelve tan loco que todos los hábitos fuertes se van al infierno. Así es ahora. "Más... quiero más", febril y desesperadamente, casi rompiendo la almohada arrugada debajo de él. - Hyung... Jungkook se atraganta con el aire, levanta la vista hacia la parte superior clara de su cabeza y se congela con un profundo empujón, lo que hace que Jimin tiemble y gima prolongadamente, moviendo su trasero y arqueándose especialmente con fuerza en la parte baja de la espalda. El Omega gira su rostro hacia un lado para respirar rápidamente hasta que aparecen círculos nublados ante sus ojos. "No te detengas", jadea y se mueve, quitando rápidamente la almohada debajo de su estómago para tener suficientes oportunidades para moverse. - ¿Cómo me llamaste? — Jungkook tiene que esforzarse mucho para exprimir al inquieto y comenzar literalmente a sacarle su naturaleza de perra. Porque esto definitivamente no ha sucedido antes. Park Jimin se dirige a él sin nadie más. ¿En serio? Jimin rápidamente se lame los labios y cierra los ojos, exhalando convulsivamente, sintiendo una molestia persistente en la espalda. "H-hyung", susurra varias veces seguidas, rastrillando las sábanas ya arrugadas entre sus dedos. - ¿Qué? ¿P-por qué paraste? Jeon tensa todo su cuerpo, se muerde el labio con fuerza, conteniéndose de un gemido, sintiendo como el omega se encoge por dentro.