El susurro calmante de las olas del mar proporcionó un breve respiro en aquellos incómodos instantes, donde Jeongin parecía ser el centro de atención, como el más preciado de los tesoros, mientras los ojos implacables de todos parecían penetrarlo sin piedad, llenos de una intensidad desbordante. La mirada de Minho, en particular, no dejaba lugar a dudas en la mente de Jeongin: estaba en una situación comprometida. Además, la expresión demoníaca en el rostro de Chris, ahora dirigida hacia Minho, irradiaba una rabia palpable.
—Sea cual sea la razón de su presencia —declaró Chris, palabra por palabra, con una ira apenas contenida—, tendrá que esperar.
Minho alzó la barbilla, enfrentando la mirada oscura de Chris, y Jeongin sintió alivio al verse liberado de tanta atención.
—Seguro es más importante que lo que sea que tú tengas por decir. —murmuró Minho, y Seungmin temió que su esposo desencadenara una situación aún más tensa con su respuesta.
—Mis asuntos están relacionados con nuestros hijos —dijo Chris, manteniendo la compostura y adoptando un tono más suave, para sorpresa de todos—. Necesito resolver algunos problemas relacionados con Thalassa.
—No necesitas a Jeongin para eso. —refutó Felix.
Chris sonrió con una frialdad que hizo que Rodo se estremeciera. Conocía tan bien a su hermano que pudo interpretar esa sonrisa como el preludio de un enfrentamiento inminente.
—Desafortunadamente para ustedes —espetó Chris, silaba por sílaba— sí lo necesito. Porque en esos asuntos está involucrado Kynthios.
Rodo y Seungmin fruncieron el ceño, confundidos, y dirigieron sus miradas a Chris, quien solo tenía ojos para Minho.
Entonces, los pasos de Jeongin resonaron mientras se interponía entre Chris y Minho, poniendo fin al duelo de miradas sombrías.
—¿Han venido a hablar sobre Ava? —preguntó, entrelazando las manos a su espalda.
Hyunjin y Felix se miraron entre sí con asombro. Jisung, por su lado, deseó escapar de allí, sintiendo una extraña aversión hacia lo que Jeongin estaba a punto de revelar.
—Y de Elián —respondió Minho, luchando por mantener la compostura, o al menos aparentarla—. Si has mencionado a mi hija, puedo suponer que imaginas a qué hemos venido.
Jeongin retorció los dedos y echó una rápida mirada a Rodo, buscando algún tipo de apoyo, pero ella parecía igual de confundida y asustada que todos los presentes.
—¿Ava y Elián? —intervino Chris— ¿Han venido por el romance de sus hijos? —soltó un resoplido amargo mientras Seungmin tomaba su mano con fuerza, implorándole que guardara silencio— ¡Todo el mundo sabe sobre la relación que mantienen Elián y Ava!
—¡Chris! —exclamó Seungmin, pero Chris se liberó de su agarre y se acercó más a Minho, quien palidecía visiblemente y cuyos ojos se abrían cada vez más.
—Créanme —agregó Chris en un susurro que sonaba más a súplica que a afirmación—, mis asuntos son más urgentes.
Rodo observó a Chris con la boca abierta, consciente de que había hablado más de la cuenta y de que los padres de Ava no estaban al tanto de la situación. Seungmin, por otro lado, mostraba una expresión de furia contenida, sus ojos reflejaban el deseo de estrangular a su esposo delante de todos. Jeongin cerró los ojos, sintiendo compasión por lo que suponía que estaba pasando por la mente de Minho.
—De hecho —intervino Hyunjin, rompiendo el silencio—, hemos venido porque nuestros hijos están en peligro, y solo Jeongin puede darnos las respuestas que necesitamos.
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Luz del Olimpo - Ícor y Sangre | Hyunlix | 2do Libro de LDI
Viễn tưởngEn los dominios del Olimpo, donde los hilos del destino entrelazan a dioses y mortales, Hyunjin y Felix, una pareja que alguna vez floreció en la gloria, ahora enfrentan una tormenta que amenaza con desgarrar el mismo tejido del reino celestial. F A...