Por si me lees

Cazador

¿Por qué todo lo que me rodea me grita que eres malo para mí?
Y si es así, ¿por qué el corazón me pesa tanto?
¿Por qué, si debo apartarme,
siento que algo queda vacío en mí?

Cazador,
¿por qué mi mente sabe que vas a matarme,
pero hasta ella duda en huir?

El nombre te queda.
Cuidas y humedeces mi mente,
soy tu presa, y eso es obvio.

Me diste de comer miel envenenada,
y de beber, un poco de compasión.

Y mientras me ahogas,
me aferro a tus brazos y los amo,
porque, después de todo,
me salvan.

Construyes promesa de humo ,pero me embriagas de amor, y puedo jurar que todo es palpable.

En tu castillo, bañado de oro, me invitas a entrar, me impregnas de inciensos donde todo es mágico en verdad.

Tú ego es la torre que adorna los cimientos,
Oh dios oscuro, dime cuanto más debo soportar para conocerte de verdad.

Duermes en mentiras y tú cabeza reposa en dolor,
Por qué entonces no te detienes ?

Tus ojos, grandes,
Como el abismo que hay en ellos.

Cuanta oscuridad puede soportar tú alma?
Y cuanto más, mancharas la mía ?

caígo de rodillas y las espinas que dejaste para mí, perforan mi piel hasta llegar al hueso.
No me atrevo a pronunciar palabra, en silencio sigo mirándote mientras tú ,
Me sonríes y muerdes mi boca.