Tenías razón
Mi príncipe se convirtió en bestia.
Sí, mi cuento no terminó con un final feliz.
Mi castillo de arena fue destruido por el viento,
y con él se fueron sus promesas.Está bien, mis tacones no soportaron el baile entero.
No comí perdices, más bien tragué realidad.No hubo brindis con buen champán,
ni un fino y delicado tul blanco.
Mi corona cayó, la perdí.
No era este mi cuento mágico,
solo probé amarga soledad.El tocadiscos dejó de sonar,
mi fiesta se inundó de lágrimas.Y entonces, en la muchedumbre de mis pensamientos,
resonaron tus advertencias.
Me puse de pie, dejé de ser la dócil doncella.
Esta vez no huí, enfrenté a mi lobo vestido de amor.
Lo miré a los ojos... lo destruí.Suerte que estaban tus brazos,
suerte que estabas tú, mamá.

ESTÁS LEYENDO
Por si me lees
PoetryEscribir es una forma de sobrevivir al amor, al desamor, a los recuerdos, a ti. A todo lo que queda cuando alguien se va. Por si me lees, no es solo un poemario; es la constante de todo aquello que fuimos o que pudimos ser. Es un mimo a los corazone...