El parque de las mariposas

Capitulo V

La fiesta.

La semana había transcurrido normalmente, era viernes, estaba en el parque antes de dar las 5 y no creí que fuera a llover pero por si acaso lleve un paraguas, Artem todavía no estaba en el parque.

Justo a las 5 llegó Artem quien venía con una mochila parecida a la de la escuela algo más vacía pero, ¿Para qué la traía?, ¿Qué traía adentro?

— Artem, ¿Qué traes en la mochila?

— Primero que nada, buenas tardes y traigo dos impermeables.

— ¿Para qué?

— Solo espera.

— ¿Estás esperando a que se desate la lluvia?

— Exacto pequeño.

— Dudo que llueva.

Treinta minutos después ya estaba lloviendo, aunque solo eran unas cuantas gotas, tal como había dicho este chico.

— Toma, pontelo que te puedes mojar.

— ¿Para qué ocupamos el impermeable?, y, ¿Por qué estamos en el parque?

— Recuerdas la lista.

— Claro, ¿Eso qué tiene que ver?

— Solo baila conmigo — si es cierto el baile.

— ¿Seguro qué quieres bailar junto a mi?

— Tan seguro como que eres mí persona favorita.

— Vale — dije ya rendido.

Se levantó primero que yo para buscar los impermeables que eran transparentes así que solo nos protegerian de la lluvia.

— Ten, sontelos un minuto.

— ¿Para qué?

— Solo tomalos.

— Claro.

Traía ambas prendas en mi brazo esperando a que Artem se pusiera el de él, mientras él rebuscaba algo en su mochila yo me ponía uno de los dos.

— Aquí está.

— ¿Tú teléfono?

— Claro pequeño, me lo das — dijo señalando el impermeable.

— Todo tuyo.

Me senté en la banca de nuevo para esperar a que pusiera la canción y se pusiera el impermeable.

— ¿Qué canción vas a poner?

— Solo ten paciencia — esa la tengo desde que nos conocimos.

— Seguro que…

— Ya te lo dije, estoy más que seguro de que bailes conmigo.

Se levanto de la banca con el teléfono en la mano mientras me tendía la otra.

— Vamos a bailar asi que no quiero que hagas ruido.

— Te juro que no pienso hablar.

— Más te vale, pequeño.

La canción aún no comenzaba y yo ya tenía miedo de que pensarían las personas al vernos bailar juntos.

— Tranquilo todo estará bien — se nota que si estaba nervioso.

— Lo se, es solo que nunca he bailado con alguien — bueno si, pero no con alguien que me guste.

— Ni yo, solo sigue el ritmo y mis pasos, tranquilizate un poco pequeño.