Llegada inesperada.
Comencé a escuchar ruidos en la casa así que me desperté, seguía durmiendo junto a Artem y estaba recargado en su pecho mientras él me abrazaba, no quería que me soltara así que fingí que no escuche nada.
Al cabo de un rato volví a escuchar los ruidos así que me separé un poco de Artem y él se despertó vaya si que tenía el sueño ligero.
— ¿Qué ocurre, pequeño? — me preguntó con voz somnolienta.
— Nada solo escuché algo.
Nos quedamos en silencio un rato y se escuchó de nuevo, se escuchaba como si un auto estuviera entrando al garaje, para después escuchar unas llaves abriendo la puerta.
— Mierda — soltó Artem sin pensar aunque yo no sabía que ocurría.
— ¿Qué ocurre?
— Mis padres han llegado.
— ¿No se supone que llegarían hasta mañana?
— Se supone pequeño, ahora no se cómo le vamos a hacer.
— ¿Por qué?
— Ellos no saben de tú existencia mucho menos que eres mi novio.
— ¿Se lo van a tomar mal?
— Muy mal pero dudo que algo malo pase, iré abajo y regreso en 5 minutos.
Salió de la cama, tal y como dijo fue al piso de abajo, de repente comencé a escuchar una voz que no era de él.
No quería salir del cuarto a menos de que él llegara y me lo pidiera, eran las 5:30, que temprano, ya no lograba escuchar voces, justo cuando creí que todos habían vuelto a dormir apareció Artem.
— Ven, pequeño.
— ¿Para qué?
— Créeme que entre más rápido ocurran las cosas más fáciles van a ser.
— ¿Qué cosas?
— Tú solo ven.
Baje por las escaleras y vi a aquella mujer, estaba sola así que supuse que su esposo trabajaría un poco más o ya se habría ido pero no, ahí estaba él entrando por la puerta, aquella mujer dirigio su mirada hacia mí y luego hacia su hijo buscando explicaciones.
Cómo había visto su madre era muy parecida a él, pero su padre no tanto además él casi no entraba a la casa la única que estaba ahí era su madre.
— Artem, ¿Qué se supone que es esto? — dijo refiriéndose a la situación en la que nos encontrábamos.
— ¿Qué cosa?
— Oh bien lo sabes, nos mandaron una foto en la que estabas metiendo a alguien en la casa, creímos que era...
— Shayla o alguna otra chica.
— Si bien lo sabes, ¿Quién es él?
— Él, es Auritz...
— Supongo que solo es tu amigo así que lo dejaré pasar.
— Si pasarás más tiempo en la casa sabrías que él no es mi amigo.
— ¿Entonces que se supone que son?
— Mi novio.
Dijo Artem sin duda en su rostro y por la reacción de su madre no creo que se lo haya tomado muy bien.
— Sabes muy bien que no puedes volver a tener tus noviecitos.
— Y novias si, ¿Verdad?
— Claro hijo, dile a este chico que acaban de terminar.
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El parque de las mariposas
RomanceQue creen que ocurra si una mañana de repente encuentran a un chico pero al ser tímido decides no hablarle aunque la curiosidad te gana y tomas el valor para hablarle, será un problema para el futuro o una solución para este. Auritz es un chico tími...