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Ella me miraba expectante, sus somnolientos ojos denotaban frialdad y desinterés pero igual no podía ocultárselo, no más.

Fue momento de rebobinar el tiempo, e incluso abstenerme de tener algún brote depresivo a causa de mi traumático pasado.

FLASHBACK:

Me desgarraba el hecho de saber lo mucho que sufría mi madre a manos de su marido, sí, porque me da asco llamarlo padre.

Odié verla toda golpeada, esto no pasaba hace un tiempo, prometió no volver a hacerlo, pero como siempre sus promesas son falsas igual que la imagen que intentaba aparentar.

No tardé en dirigirme a su empresa, sería su fin y no me importaba joder todo a mi paso.

Entré hecho una fiera pero no lo ví en su despacho.

Decidí hacer algo que estuvo en mis planes desde el primer momento que ejecutó la violencia con mi madre, lo pensé tantas veces y joder, no tenía ningún tipo de intenciones de arrepentirme después de esto.

– Vaya, hasta que tienes la vergüenza de visitar a tu padre.– dijo ingresando a la iluminada oficina.

Me crucé de brazos al sentir cómo hormigueaban, mis puños estaban blancos de tanto apretarlos pero mantuve la calma.

– Al menos tengo eso, vergüenza.– rebatí.

Su rostro adoptó la típica expresión soberbia de siempre, sin un ápice de culpa por lo que había hecho.

Por un segundo se quedó observándome fijamente aún sin borrar tan inquietante expresión de su rostro.

– Tienes que entender hijo, las mujeres necesitan disciplina, y tu madre no conoce su lugar.– espetó soberbio,  antes de comunicar a su secretaria que le trajera dos cafés.

Minutos después el imbécil se encontraba hablando  por su teléfono, estaba muy alterado y le pegaba repetidas veces a la pared.

Sin articular palabra alguna una mujer joven entró cabizbaja a la oficina y dejó las dos tazas sobre el espacioso escritorio.

Apreveché la distracción de que estaba en medio de una llamada y poniendo un pañuelo sobre ella para evitar dejar mis huellas  vertí una ampolla entera de tramadol en el café hirviendo que reposaba sobre su escritorio.

Se acercó con descarada actitud y se sentó a beber el oscuro líquido.

Admiré con suma delicadeza cómo se lo bebía lentamente y  en cuestión de minutos su piel comenzaba a tornarse roja y cómo tocaba su pecho en señal de que estaba teniendo un ataque al corazón, definitivamente eso fue lo que tanto esperé.

FIN FLASHBACK:

Espera, según mi primo su padre causó un infarto al tuyo.– siseó mientras que su mirada sólo irradiaba confusión.

– Pues no, lo maté yo.– dije en un despreocupado tono de voz.

– ¿Y lo dices así? ¿De la nada?, mierda Jung que mataste a tu padre...¿ Y no te investigaron?.– cuestionó con los ojos salidos de órbita.

– Fue una sobredosis, él consumía tramadol, así que ni siquiera sospecharon.– bufé siendo escudriñado por sus cansados ojos.

« Lo planeé todo, su muerte, por tantos años, obviamente no iba a ir a la cárcel por semejante basura de persona, sólo estaba esperando su próximo paso para  ejecutar mi plan»

– ¿Lo premeditaste?.– chilló.

– Sabía que esto pasaría, no todos los días te enteras de que tu pareja mató a su padre.– musité.– Si te asusta conocer mis secretos está bien, es tu decisión irte o no.– dije taciturno.

Venom Lips || The Beggining 《 JHS- TERMINADA》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora