─ Sábado, Ocho de la noche. Cabaña de Afrodita. No te lo pierdas ─me entrega una invitación y paso seguido me guiña un ojo.
Piper se da media vuelta y empieza a entregar invitaciones a diestra y siniestra. Yo miro la invitación que tengo en mano y acaricio el listón que lo mantiene bien cerrado. Desamarro el moño y leo el contenido del papel.
Frunzo el ceño.
« Fiesta de máscaras ¿y yo de donde saco una? »
Hago una mueca y hago en rollo la invitación, tomo mi mochila donde había traído mis cosas para entrenar, de hecho ya había terminado, solo que Piper me interceptó.
Camino por el campamento viendo la gente alrededor mío, muchos ya traen las invitaciones en mano y sonrío al ver eso. Se nota que los de la cabaña de Afrodita quieren que vayan todos.
Cuando llego a mi cabaña entro sin más, dejo mi mochila y la invitación en el mueble y tomo una toalla para meterme a bañar. Siendo sincera, me hubiera gustado tardarme bañándome, pero la verdad es que no pude, el agua estaba helado, así que cuando salgo del baño, me abrazo a mí misma envuelta en toalla mientras tiemblo por el frío.
─ ¿Te ayudo a calentarte? ─Una voz masculina hace que me sobresalte y suelte un pequeño grito. Me volteo en dirección a la voz y una mirada de diversión cae sobre mí.
─ ¡Nico! ─ Exclamo ─ ¿Qué haces aquí? ─Pregunto mientras aprieto la toalla que me envuelve.
Noto la mirada de Nico pasearse por mi cuerpo que es cubierto únicamente por una escasa toalla.
─ Venía por ti ─contesta viéndome de nuevo a los ojos.
Muerdo mi labio con nerviosismo y aprieto aún más la toalla como si eso hiciera que me cubriera más.
─ Entiendo, bueno... ─me quedo en silencio por un segundo─. Déjame cambiarme, por favor.
Él sonríe y asiente, se aleja de mí y camina directo a mi cama... no a la salida.
» Nico... ─murmuro─ la puerta está allá ─señalo con mi cabeza.
Nico asiente mientras me regala una sonrisa.
─ Lo sé.
Frunzo los labios y balanceo sobre mis tobillos.
─ Voy a cambiarme
─ También lo sé.
─ Debo quitarme la toalla
─ Entiendo
─ Quedaré desnuda
─ Eso es obvio
─ ¡Nico! ─Exclamo.
Escucho su risa y mis mejillas se sonrojan.
« ¿Soy yo o hace calor? »
─ Tranquila mio Angelo, solo quería jugar contigo ─ Dice eso mientras se levanta y se acerca hacia mí, cuando su rostro está tan cerca al mío que nuestras narices podrían rozarse susurra: ─ pero no me quejo si me dejas quedarme.
Muerdo mi labio y siento mi cara arder aún más. Niego con la cabeza y volteo a ver a la puerta.
─ No tardo, espera afuera ─ digo sin voltearlo a ver porque sé que me podría poner más roja de lo que ya estoy, si eso es posible, claro.
Noto a Nico irse y cerrar la puerta, suelto todo el aire que no había notado que estaba reteniendo y me dedico a buscar algo que ponerme lo más rápido que pueda.
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Y si te digo que te amo... (Nico Di' Angelo) (Re- Subiendo)
FanfictionPesadillas. Recuerdos. Tal vez para una persona normal esas cosas son totalmente diferentes, pero en el caso de ________ ambas van de la mano. Porque fue un sueño el que desató toda la verdad, que reveló tanto pero a la vez nada. Y eso_________...