La magia de la Veela

K A F L I 45

Lilja guardó rápidamente sus pertenencias, realmente quería que terminara el dia lo mas pronto posible; la situación en Londres era algo que estaba afectando a todos los representantes de varios países en el instituto, sobre todo aquellos que estaban en Seguridad; y aunque sabía que pronto vería a su prometido, Bill estaba mucho más tenso desde que había ido a platicar con sus padres cuando regresaron a Islandia; ninguno de los dos podía disfrutar esta nueva etapa como les gustaría.

—¿A dónde vas tan rápido veela?

—Sirius— Lilja había sacado su varita tan rápido que el primogénito había levantado las manos en cuanto vio que podía recibir un ataque de la mejor duelista que había conocido —No es bueno que me asustes de esa manera.

—Lo siento— después sacó de su pantalón un papel —Ya casi es mi cumpleaños, quería festejarlo en mi casa, algo tranquilo.

—¿Cuándo tus reuniones han sido tranquilas Black?— Sirius procedió a reírse, ganándose varias miradas de quienes estaban ahí —¿Qué quieres que lleve? Aún te debo unos platillos de Bulgaria...

—Con tu presencia es más que suficiente— Sirius se quedó viendo como Lilja metía el papel —Espera, espera.

—¿Te pasa algo? ¿A quién viste?— Lilja rápidamente empezó a observar todo a su alrededor para ver si corrían peligro y debían de actuar rápido.

—Dime que no me ocultaste algo tan importante y solo es algo que decidiste utilizar por ser algo de veela.

—Mi ropa es más muggle que veela desde que me vine a Londres, entonces no sé a que te refieres.

—¡El anillo en tu mano izquierda!

—Ah, el anillo— Lilja se acomodó su cabello de manera nerviosa —Bill me pidió que nos casáramos en Islandia.

—Y, ¿Por qué no hemos festejado o anunciando a todo el mundo?— Sirius cruzó los brazos mientras negaba con su cabeza —Esto es una gran noticia que a todos nos alegraría en estos tiempos.

—No había tenido tiempo para avisarles.

—¡En el cumpleaños de Harry no te vi con anillo!

—¡No iba a quitarle el protagonismo a Harry en su cumpleaños!

—Llevas meses en Londres y en ningún momento los he visto anunciar su matrimonio.

—Primero queremos hablar con la familia Weasley, no sé cómo se tomaran la noticia, sobre todo porque Bill pregunto antes a su tía para que le diera el anillo.

—Hoy vienen a cenar, ¿no?— Lilja asintió temiendo lo que se podría significar esa pregunta —Acompáñame a comprar todo para festejar su compromiso.

Lilja se dejó guiar por su amigo por todas las tiendas que conocía sobre decoración, platillos y todo lo que pudiera anunciar que la pareja internacional iba a casarse. "Una noticia buena en tiempos tan difíciles" era lo que repetía a todas las personas que les atendían en cuanto llegaban a una tienda.

—¡Ya llegamos Remus!— gritó Sirius en cuanto abría la puerta —No puedo creer que mejor te escribiera una carta después de que te diera el anillo.

—Supongo que los nervios siempre te bloquean la mente en los momentos más importantes— dijo mientras dejaba las bolsas en el suelo —¡Hola Remus!

—¡Lilja! Aún es muy temprano para que lleguen a la cena— comentó el hombre lobo mientras traía vasos de agua para quienes habían llegado —¿Qué compraste ahora, Sirius?

—Compre lo necesario para anunciar el compromiso más esperado— contestó mientras levantaba la mano izquierda de la vela— Remus se quedó callado y Sirius solo agitaba la mano más rápido de la veela para que entendiera lo que quería decir.

—Sirius, Remus ya sabía— contestó Lilja bajando su mano lentamente.

—Espera, ¿le contaste a Remus antes que a mí?— después giró hacia su pareja —¿Tú no me contaste? ¿Desde cuándo sabes? Traicionero.

—No era una noticia mía para compartir— contestó Remus cuando abría las bolsas y veía toda la decoración —Y si te contaba, todos en Inglaterra sabrían que se iban a casar.

—Si quería contarte Sirius, eres mi segundo Black favorito— Lilja lo abrazo para calmarlo un poco —Pero ahora, ¿cómo quieres que decoremos tu casa para la cena?— Sirius rodó los ojos al escuchar las palabras de su amiga veela, pero la abrazó de vuelta.

Tanto Remus y Lilja fueron quienes seguían las órdenes del mayor de los hermanos Black, todos sabían que él tenía un talento innato para la decoración, y con movimientos varita, la casa quedó decorada rápidamente.

—¡Bienvenidos!— dijo Sirius —Llegan justo a tiempo para una cena increíble.

—Veo que hay decoración de compromiso— varios miembros de la Orden se quedaron extrañados porque no estaban tan al pendiente de la vida personal de cada uno.

—¡Bill!— gritó Lilja al ver que llegaba su pareja —No fue mi culpa.

—Hola cariño— le dio un pequeño beso en su frente, después se dio cuenta de cómo todos los miraban intensamente con pequeñas sonrisas, entonces entendió a lo que se refiere Lilja —Gracias por todo esto Sirius.

—No es nada, una buena noticia en tiempos difíciles.

—Pensé que habías cancelado este plan tan loco, William— hablo detrás de Lilja la matriarca de los Weasley, quien nadie se había dado cuenta de que había llegado junto al otro festejado.

—El matrimonio no es algo loco, mama.

—Solo digo que es algo apresurado— Lilja se quedó agarrando la mano de su novio, evitando que hubiera otras palabras hirientes a quien sería pronto su familia —Ni siquiera llevan un año de novios, no se conocen, completamente, esta etapa del enamoramiento se pasará.

—Estar con quien estás destinada no se puede comparar con un enamoramiento de corto plazo, me gustaría pensar que siempre estaré enamorada de Bill, fuera feo o fuera diferente a lo que esperaba al saber un poco más sobre lo que significa esto, él es mi pareja destinada y siempre haré lo posible para estar con él.

—Pero, ¿una boda en tiempos de guerra?

—Usted lo hizo, ¿por qué no dejar que Bill lo haga?— todos se quedaron callados y su novio solo le apretó la mano —Como dice Sirius, algo bueno tenía que salir en estos tiempos difíciles.

—Que mejor que celebrar el amor que se tienen estos dos adultos— hablo Remus más tranquilo de lo que muchos esperaban —Vamos Molly, si ellos se quieren casar, es porque ya vieron todo lo positivo y negativo de hacerlo.

—¿Nuestro hermano se va a casar?— llegaron los gemelos por la chimenea —Nos hubieran dicho para traer más cosas de la tienda.

—Primero la reunión y después el festejo— Lilja agradeció que apresuraban más las cosas antes de que se hiciera una reunión más incómoda de lo que se esperaba, al menos ya no tenía un secreto que guardar y podía gritar a todo el mundo que se iba a casar con su alma gemela.