Capitulo 31. Castigada.

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Rojo, rojo y más rojo. Era lo único que podía ver en mis cuadernos, marcas rojas señalando los errores que había cometido al escribir o al hacer mis tareas.

Había notas en mi cuaderno como:

"Mejora tu ortografía"
"Trabaja en tu letra"
"Arregla el orden de los números"

Muchos errores en esta escuela que ameritan un castigo físico pero los profesores habían sido algo comprensivos conmigo después de tres semanas de haber vuelto a la escuela. Algunos solo decían "Tiene que mejorar, señorita Grey" otros solo suspiraban y marcaban esa espantosa equis con tinta roja u otros solamente negaban con la cabeza y seguían con su trabajo. Todos los profesores se limitaban a regañarme o hacerme malos comentarios, todos excepto el profesor Sánchez, nuestro maestro de Química que parecía disfrutar el exponerme y ponerme en ridículo frente a todas en la clase.

¡Aquí podemos admirar, la pereza en su Máximo esplendor!— gritaba el profesor mientras sostenía mi cuaderno y lo levantaba en alto frente a todas.

¿Eres tonta o simplemente eres floja?

—¿Por qué no puedes hacer un trabajo tan sencillo?

¡LA REINA DE LOS ERRORES!gritaba para que todas se rieran.

Esos y muchos comentarios más soltaba el profesor frente a toda la clase. No podía comentárselo a mi padre como Eloise tanto insistía, se preocuparía o peor creería que estoy loca y el profesor era completamente consciente de ello, así que no se limitaba al hablar. Gracias a esto mi autoestima estaba por los suelos.

A pesar de que los demás profesores no me castigaban físicamente, si me pedían que me quedara en las horas de descanso en el salón de clases para "corregir" mis errores, aunque yo no sabía lo que estaba mal, solo veía las marcas rojas fijamente y me quedaba esperando a que el siguiente profesor o profesora llegara.

Todo se había hecho una rutina, ahora mismo estaba guardando mis pertenencias para irme a casa cuando Eloise me llamó.

—¿Ese no es tu padre, Pheebs?— preguntó mirando hacia la puerta principal.

Cerré mi casillero y observé, estaba en lo cierto mi papá iba entrando a la escuela, como siempre bien vestido.

—Si, si lo es.— le contesté para comenzar a caminar hacia el.

—Se puede saber...¿Por qué me ha llamado el director?— preguntó serio. Hace mucho no me hablaba así, desde mi regreso su actitud y hasta su tono de voz habían cambiado a uno más...¿familiar?. Pero este no era el caso.

—Buenas tardes, para ti también— le dije a lo que frunció el ceño. —No se por qué te ha llamado. No he hecho nada malo...creo— dude a lo ultimo.

—¿Crees?...

—Señor y señorita Grey. Pueden pasar, el director los espera.— interrumpió la secretaría.

—Muchas Gracias— le respondió mi padre con una sonrisa educada sin mostrar los dientes.

—Señor y señorita Grey, tomen asiento— dijo el director Carter una vez que estábamos dentro de la oficina.

—Buenas tardes, director Carter— saludó mi padre estrechando la mano del hombre para después tomar haciendo en la silla frente al escritorio.

Me quede callada y tomé asiento en la silla del lado izquierdo, como odiaba esas sillas de madera con asientos de cuero, gracias a la falda del uniforme al sentarme la parte de atrás de mis muslos descubiertos quedaban directo a la piel y esta me hacía sudar.

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⏰ Última actualización: May 16 ⏰

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"Esta vida no es fácil" ( La hija de Christian Grey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora