"Esta vida no es fácil" ( La hija de Christian Grey)

Capitulo 1: El dia en que mi vida cambio para siempre

Estaba saliendo de la escuela, había sido un largo día, además de que debía apresurarme en llegar a casa por dos razones: la primera, está oscureciendo y de noche el pueblo es muy peligroso y la segunda es que tengo mucha tarea por hacer.

Al llegar a casa encontré a la abuela en la cocina, ella se la vive ahí, le gusta mucho cocinar y lo que más le gusta es que yo coma. (Aunque coma muy poco).

     —¡Cariño! Llegaste! ¡Esta lista la cena!— dijo mi abuela con una sonrisa.

     —Muchas gracias abuela. Creo que comeré en mi habitación , tengo mucha tarea por hacer.— le dije algo preocupada.

     —Oh está bien cariño, no te preocupes aquí está tu plato—dijo entregándome este.

Era un gran plato de comida, tenia arroz, pollo y verduras en abundancia, mí abuela siempre me sirve así, aunque sabe que nunca me lo acabo ni me como las verduras porque no me gustan.

     —Cuando termines bajas tu plato y lo lavas por favor— dijo mi abuela mientras subía las escaleras.

     —Claro— dije para sin más dirigirme a mi habitación.

Habían pasado alrededor de 2 horas y yo estaba apunto de terminar mi tarea estaba recostada en mi cama terminándola cuando mi abuela entró en la habitación.

     —¿Como vas con eso cariño?— me preguntó.

     —Bien, ya casi termino.— le conteste con una sonrisa algo cansada.

     —Que bueno— dijo tomando mi plato con la mitad de la comida sobre la mesa. —Cariño no me gusta que comas tan poco— me dijo algo preocupada.

     —Abuela, yo siempre he comido muy poco no es novedad— dije con algo de obviedad.

     —Lo se, pero no es normal, a tu edad deberías comer todo el plato— dijo ella acariciando mi mejilla.

     —De acuerdo, intentaré comer todo la próxima vez— le dije.

     —Eso espero aunque..¡Ay! ¡Auch!— dijo poniendo las manos en su pecho.

     —¡Abuela! ¿Estás bien? ¿Que tienes?— le dije preocupada sentándome en la cama a un lado de ella.

     —¡Si..si! Estoy bien...solo fue un pequeño dolor- dijo ella bajando sus manos lentamente.

     —¿Estás segura? ¿No quieres que llamemos al doctor?- le pregunte asustado.

     —Estoy bien tranquila.- dijo recobrando el aire. —Bueno, venia para avisarte que tu padre llamó, dice que mañana tendrá una junta en la ciudad de Oregón y el fin de semana vendrá a visitarte— dijo ella con una sonrisa. Ante esto solté un gran gruñido.

     —¿Por qué tiene que venir? A él no le importo— dije molesta.

     —Cariño no digas eso y claro que te quiere por que es tu padre y por eso viene a verte, quiere saber cómo estás y... ¡A lo mejor te trae un regalo!— dijo ella cantando lo último haciéndome reír.

     —¡Pero es que...no quiero que venga!— dije frustrada.

     —Solo será el fin de semana, sé que lo soportarás— dijo ella dándome ánimos.

     —Lo haré, siempre lo hago— me dije sonriéndole.

     —¡Esa es mi niña! De acuerdo, te dejo para que sigas haciendo tu tarea, no duermas tan tarde. Buenas noches mi niña— dijo dándome un beso en la frente.