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𝚃𝚊𝚎𝚑𝚢𝚞𝚗𝚐'𝚜 𝙿𝙾𝚅

No voy a mentir.

Jungkook y yo pasamos más o menos unos veinte minutos besándonos en su auto, hasta que escuchamos a mi madre quejandose de su vida en voz alta, como para que todos los vecinos las escuchen, mientras dejaba la casa con mi hermanita siguiéndola hacia la casa siguiente.

Ella nuevamente iba a salir y como yo no le avise que iba a volver este fin de semana, de seguro prentende dejarla con la vecina.

— Tengo que irme — susurre sobre sus labios, deseando que el momento hermoso no se disuelva apenas baje del coche —. Entra a tu casa.

— ¿Ella no va a hacerte nada?

— Más que gritarme, no — le dije —. No te preocupes, he lideado con ella desde que tengo memoria, estaré bien.

— No me tranquiliza eso.

— Ve a casa, ¿sí? — acaricie su mejilla — Y trata de evitar escuchar. Mejor dicho, intenta ignorar sus gritos, ella es así.

— ¿Siempre te ha dicho cosas feas?

Me quede callado, y aparte la mirada con pena. Como si yo fuese el que hace las cosas mal, como si tuviera yo que avergonzarme porque ella es... así.

— No importa, en serio — le dije —. No le presetes atención, por favor.

— Vale — suspiró rendido y se volvió a acercar para besarme.

Y por más que yo lo niegue o que intente hacerlo ver diferente, estoy completamente enamorado de Jungkook, que no puedo siquiera entender como es que puedo dañarlo tanto con mis acciones y palabras.

— Jungkook...

— Espera a que entre a la casa de tu vecina, sk te ve saliendo de mi auto te hará preguntas — susurró, besando mi mejilla luego.

— ¿Puedes irte a dar una vuelta? — quise bromear, o intentar hacerlo, porque realmente no quiero que escuché todo lo que me dice mi madre.

Él suspiró y beso mi frente.

Bueno, eso no me lo esperaba. No me esperaba que ese beso tan dulce y sencillo causara tanto en mi corazón, incluso empece a sentir como mis mejillas se encendían debido a esto.

— Puedes venir a casa si es necesario — expreso su preocupación —. Llámame. No importa que tan tarde sea o... no sé, solo llámame si me necesitas.

Y nuevamente me pregunto como es que alguien como él puede amar a alguien como yo, nuevamente me llega la incertidumbre y el sentimiento de que esto no me lo merezco, que no me lo merezco a él.

Quizá Mingyu tiene razón. Quizá ese idiota tiene razón y voy a terminar dañando a Jungkook y arrastrandolo al infierno conmigo, porque soy un maldito hijo de puta egoísta.

Quizá... quizá nunca debí sacar a la luz lo que siento por él.

Quizá...

— ¿Amor? — Jungkook tenía su cabeza ladeada y me miraba con confusión.

— Ah, está bien — le dije, rápidamente —. Ya me voy, ¿sí? Ten un lindo día con tus padres.

Y como un cobarde huí de su auto, corriendo hacia la casa de mi vecina. Justo mi madrea salía de ella y cuando me vio allí, su rostro se volvió de enejo puro.

Inhale profundamente y me detuve en seco, rezandole al cielo porque Jungkook se haya bajado también del auto y haya entrado a su casa. Ella iba a empezar a gritarme, con todo su enojo y desprecio.

— ¿Hasta hoy te dignas a aparecer?

— Vete si quieres, yo iré por Jisu — le dije secamente y ella solo se enfadó más.

— Eres un desconsiderado, me haces pagar por una niñera porque no puedes venir a cuidar de tu hermana. Yo tengo que trabajar, Taehyung.

— Yo estudio, mamá. ¿Cómo rayos cuido a Jisu? ¡Dímelo!

— Tienes la posibilidad de venir los fines de semana y aun así decides quedar sin hacer nad en la ciudad porque no te preocupes por nadie más que no seas tú mismo.

Iba a gritarle, iba a responderle, iba a defenderme.

Mas no lo hice. Porque vi como una pequeña niña se asomaba en la ventana y prestaba atención a la discusión, luciendo triste, preocupada, sensación que no debería tener, mi hermana no debería tener la misma infancia que yo, no... ella no.

Ignore las palabras de mi madre y pase a su lado, dirigiéndome a la casa de mi vecina, para poder recoger a mi hermanita.

— No sé que fue lo que hice mal para tener un hijo como tú.

Y nuevamente, todo era mi culpa.

Todo siempre es mi culpa. Yo siempre soy el malo, el malagradecido, la decepción y la desgracia de su vida.

Ese soy yo.

No su hijo, no su amor, no el fruto de su vientre o del amor.

Soy la peor de sus decisiones.

— Solo vete, mamá.

— L I L I

Anti-Hero ✿ Kookv AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora