Las trece veces que te vi

Capítulo 11. Aquel noviembre en mi boda. Parte 2.

Avery.

Noviembre, a días de mi boda con Johari debo hacerme a la idea de que perdí a Asher, los preparativos finales de la boda no son suficientes para sacarlo de mi mente, de mi corazón, de mi ser, llegan días donde deseo ir y buscarlo por cada lugar de Atlanta, llegan noches en los que el cuerpo de Johari no es suficiente y requiero el de él. Cassidy se esfuerza por mantener mis pensamientos dispersos, ocupados y distraídos, pero cualquier intento es en vano.

"Por eso es mejor decir adiós, ¿no te parece?", sus palabras duelen, aún resuenan, aún tocan la herida con sal en ella. Pienso en si escribir, pienso en si llamar está bien, pienso en él.

Mañana es mi boda, Bernet y yo nos encontramos en la recepción terminando los últimos detalles. -¿Quieres contarme lo qué pasa? – Dice Bernet tomando mi mano.

-¿De qué hablas? – Intento sonreír mientras me invita a tomar asiento.

-Av, sé que no soy la más indicada o a quien quisieras para hablar de estas cosas. – La veo un poco confundida. -¿Estás segura que quieres casarte? – Susurra.

-Sí, estoy segura, ¿por qué lo preguntas?

-Te he visto distante estos últimos días, Johari cree que estás algo asustada por lo que pueda pasar, después de... - Se acomoda lo poco de cabello que le queda, después de regresar de Nueva York y ver a los especialistas Bernet inició un tratamiento de quimioterapia que la ha debilitado en gran medida, trata de mantenerse fuerte por Johari, no quiere que la vea desistir antes su boda.

-Bernet, estoy segura de casarme con tu hija, y gracias. Estas últimas semanas juntas han sido maravillosas. Me has dejado conocerte más allá, haré lo posible por hacer feliz a tu hija. – Digo tomando sus manos.

-¿Lo harás cuando yo no esté?

-Sí, lo prometo...

La boda llegó, los invitados me observan entrando en medio del salón, Johari se ve preciosa en su vestido, Bernet llora desconsoladamente mientras Tanner se ocupa de calmarla un poco, Cassidy y Paul me ven felices. La ceremonia transcurre con normalidad, Asher no viene a mi mente en este momento, ambas nos preocuparnos por no equivocarnos al decir nuestros votos, al aceptarnos una a la otra durante el resto de nuestras vidas, al complementarnos como una sola. Los momentos ante mis ojos se ven en cámara lenta, no puedo creer que me esté casando, que Johari me ame de este modo.

Después de consolidar nuestro "acepto" con un beso, nos aventuramos a nuestro primer baile como esposas. Ella me toma de la cintura mientras mis manos rodean su cuello.

-Se que desearías que tu padre estuviera aquí. – Dice con lágrimas de felicidad en el rostro. -Yo le prometí que te protegería y que jamás te dejaría. – Vuelve a besarme.

-También le hice esa promesa a tu madre. – Susurro.

Noviembre se aproximada a finalizar, otoño se aventura con sus días fríos a decirnos adiós. Diciembre llega y él vuelve a mi mente. Un mensaje llega para descolocar mi corazón.

-¿Te parece unaúltima cita? Creo que deberíamos despedirnos bien.